La presencia de vehículos de la Guardia Civil es una marca reconocida en el territorio español. Desde la introducción de los automóviles en España a principios del siglo XX, los coches de la Guardia Civil han estado representando al Estado en las variantes estéticas de la corporación. Desde el auténtico Ford T de 1912, hasta el actual Seat León, pasando por el Mercedes 220 de 1952. Estos vehículos han sido esenciales para el cumplimiento de la misión institucional de la policía.
A lo largo de los años, la selección de vehículos de la Guardia Civil ha demostrado una particular preferencia por el diseño de los automóviles. Esto permite a los ciudadanos identificar y sentirse tranquilos y seguros al ver patrullar los vehículos policiales por las calles y carreteras de toda España. Esta preferencia marca una división entre los vehículos comerciales y los de uso policial, que a pesar de usar los mismos nombres, tienen diferentes configuraciones. De hecho, la selección de vehículos no se ha estancado a lo largo de los años y, aunque la meta sigue siendo la misma, los vehículos de la Guardia Civil se renuevan según sea necesario para seguir cumpliendo con los requisitos de la policía y los gustos de los ciudadanos.
5Los Ford Mondeo desde 2000 hasta la actualidad
Los coches Ford Mondeo han sido parte de la cara policial durante 20 años. Estas camionetas se han convertido en un icono para los españoles, siendo testigos de la evolución del parque automovilístico de la policía.
Los Mondeo han evolucionado desde su versión de 2 litros de 1993 hasta la más reciente de 2.5 litros turbo alimentados. Estos vehículos son una combinación de comodidad y tecnología, lo que les permite ser tanto un medio de transporte para los policías como una herramienta de trabajo.
Con un diseño innovador, los Ford Mondeo han sabido adaptarse a los cambios del siglo XXI, manteniendo una línea continua con la historia de la policía española.