La compañía de alquiler de vehículos Hertz se convirtió en noticia en octubre de 2021 al anunciar la compra de 100.000 coches eléctricos Tesla por un monto de 4.200 millones de dólares en ese entonces, principalmente unidades del Model 3. Sin embargo, pocos años después, la empresa ha admitido que esta decisión no fue acertada. En una reciente conferencia sobre resultados, expuso las razones que llevaron a que sus pérdidas alcanzaran los 2.900 millones de dólares en 2024. En términos financieros, la empresa perdió 1,18 dólares por acción, un valor muy por encima de lo proyectado por los analistas.
“Durante 2024 nos enfocamos en estabilizar la compañía e introducir cambios fundamentales para transformar nuestro negocio”, afirmó Gil West, CEO de Hertz. “Con nuestro equipo directivo renovado y una estructura organizativa optimizada, estamos preparados para ejecutar nuestra estrategia con disciplina y velocidad”. Dentro de este plan de reestructuración se incluyó la venta de aproximadamente 30.000 coches eléctricos, un proceso que se puso en marcha en 2023 y finalizó en el último trimestre de 2024.
La importante pérdida que tuvo Hertz en el último año
A pesar de esta estrategia de venta, la empresa reportó una pérdida neta GAAP de 479 millones de dólares en el cuarto trimestre del año. Lo más sorprendente es que la situación pudo haber sido aún peor. En 2023, la compañía registró pérdidas de 245 millones de dólares vinculadas directamente a la liquidación de su flota de coches eléctricos. A pesar de no repetir esta misma caída en 2024, la gran incógnita sigue siendo qué salió mal en su transición hacia la movilidad eléctrica.
En teoría, los automóviles eléctricos resultan más económicos de operar que los de combustión interna, pero esta ventaja solo se hace evidente cuando los vehículos están en circulación constante. Según MarketWatch, “los coches eléctricos no gozan de gran popularidad entre quienes alquilan vehículos debido a la infraestructura limitada de estaciones de carga en Estados Unidos”. En consecuencia, aquellos automóviles que permanecen inactivos en los estacionamientos representan una carga financiera para la empresa en lugar de generar ingresos.
La decisión de la empresa con los coches eléctricos
Recientemente, Hertz aclaró que no está renunciando por completo a los coches eléctricos, sino que está ajustando su flota de acuerdo con la demanda. Para ello, está reubicando una mayor cantidad de vehículos en regiones donde la adopción de esta tecnología es más elevada y la infraestructura de carga es más eficiente. California, donde el uso de coches eléctricos es significativamente mayor, se presenta como uno de los mercados clave para este nuevo enfoque.
Por el momento, West confía en que la empresa está bien encaminada para revertir la situación. Sin embargo, los inversionistas no comparten el mismo optimismo. Tras la publicación del informe financiero, las acciones de Hertz sufrieron una caída del 11%. Aunque posteriormente lograron recuperarse parcialmente, siguen registrando una baja del 8,4% al momento de redactar este artículo.