El inicio de un nuevo año no solo trae consigo nuevas metas y proyectos, también trae la llegada de obligaciones fiscales que todos debemos cumplir. Uno de estos impuestos, conocido como el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), popularmente llamado impuesto de circulación, es uno de los que más atención requiere por parte de los propietarios de coches. ¿Por qué? Porque si no te ha llegado ya, muy pronto llegará esa carta que, irónicamente, es tu coche quien la provoca.
2El proceso de pago
La responsabilidad de recaudar este impuesto recae en los ayuntamientos, y cada uno establece sus propias fechas y procedimientos. Generalmente, el período voluntario de pago comienza a principios del año, y en muchos lugares se extiende hasta el segundo trimestre. Si por alguna razón no pagas durante este período, te enfrentarás a recargos y posibles embargos, tanto de tu cuenta bancaria como de tu vehículo.