En pleno agosto, el calor no solo derrite el asfalto: también pone en jaque a muchos coches eléctricos. Según los últimos datos analizados por Carly, la app líder en diagnosis automotriz, las temperaturas extremas están sacando a relucir puntos débiles en marcas de renombre. Más del 70% de los BMW y casi el 67% de los Tesla presentan riesgo de averías críticas cuando el mercurio supera los 35 °C.
Si planeas hacer un viaje largo, tenlo en cuenta. El calor puede ser un enemigo silencioso para tu coche eléctrico. Y lo peor es que muchos conductores ni siquiera lo saben. ¿La buena noticia? Estás a tiempo de tomar medidas para evitar que tus vacaciones se conviertan en una pesadilla en el arcén.
4Consejos útiles para sobrevivir al calor sobre ruedas

Además de la diagnosis con Carly, hay otros pequeños gestos que pueden marcar la diferencia. Por ejemplo, aparcar en la sombra. Al hacerlo, no solo proteges la batería, sino también los sistemas electrónicos más sensibles. Otro truco sencillo es no recargar la batería al 100% en días especialmente calurosos. Reduce el estrés térmico y mejora la vida útil del sistema.
Activar el climatizador mientras el coche aún está enchufado también ayuda: enfría el habitáculo sin comprometer la autonomía y reduce el sobreesfuerzo del sistema de refrigeración una vez que empieces a conducir. Y si puedes evitar las cargas rápidas durante olas de calor, mucho mejor. Son muy cómodas, pero generan calor adicional y pueden acelerar el deterioro de la batería.