Las baterías de vehículos eléctricos llevan años en el punto de mira por los incendios que se han reportado en muchas ciudades del mundo, pero el último incidente no lo ha protagonizado ningún coche, sino una bicicleta eléctrica.
Ocurrió hace solo unos días del barrio de Puerta del Ángel, en Madrid, cuando un usuario se bajó de la bicicleta eléctrica en la que circulaba y poco después se produjo el incendio. Lógicamente, ha reabierto el debate sobre la peligrosidad de estos dispositivos, pero le da la razón a los que hace meses prohibieron su uso —y el de los patinetes eléctricos— en el transporte público.
2«Esto es lo que preocupa de los patinetes»
En el vídeo de lo ocurrido con la bicicleta eléctrica, muchos usuarios lo extrapolan a los patinetes eléctricos, pues son los Vehículos de Movilidad Personal (VMP) que más han crecido en los últimos años. De hecho, las ordenanzas municipales ya se han encargado de regular su uso.
Además de tener que estar homologados y no poder superar los 25 km/h de velocidad máxima, deben cumplir ciertas condiciones técnicas, de seguridad y está prohibido llevarlos en el transporte público. Por ejemplo, Madrid, la ciudad en la que ha ocurrido el incendio de la bicicleta eléctrica, impide llevarlos en los autobuses de la EMT, interurbanos y urbanos de otros municipios, el Metro de Madrid y los principales intercambiadores de la ciudad.
En este caso, es una prohibición de carácter temporal hasta que se demuestre que es seguro llevarlos en el transporte público. Renfe tampoco permite acceder con ellos a sus trenes de cercanías, regionales, alta velocidad y larga distancia.
