Las camionetas de alto rendimiento están de moda, y tanto Audi como BMW lo saben. En el mercado estadounidense, modelos como el RS6 Avant y el próximo M5 Touring confirman esta tendencia. Pese a esto, en Europa, la supremacía de los familiares deportivos ya es una realidad, y dos de los máximos exponentes son el RS4 Avant y el M3 Touring.
La revista francesa Motorsport Magazine no dudó en poner a prueba a estos dos titanes en una carrera de resistencia. En una recta de 1.000 metros (alrededor de 0,6 millas), ambos modelos se enfrentaron en una batalla por la supremacía. Un lujo para los que amamos la velocidad y, sobre todo, la competición entre dos vehículos que realmente están a la altura de las expectativas.
¿Cómo fue la carrera en el Audi RS4 y el BMW M3?
Analizando las especificaciones, ambos modelos parecen estar muy parejos. El Audi en cuestión desarrolla 450 caballos de fuerza y 600 Nm de torque gracias a su motor V6 biturbo, y transmite la potencia a las cuatro ruedas a través de una transmisión automática de ocho velocidades. Por su parte, este BMW ofrece 510 caballos de fuerza y 650 Nm de torque provenientes de un motor de seis cilindros en línea biturbo, el cual envía la potencia a las cuatro ruedas mediante una caja de cambios automática de ocho marchas.
Sin embargo, en la pista, la historia fue diferente. Los 60 caballos de fuerza adicionales del M3 Touring se hicieron sentir desde la salida, y el BMW tomó la delantera desde el principio. A medida que avanzaba la carrera, la diferencia se ampliaba a favor del M3, y al cruzar la línea de meta de los 1.000 metros, el RS4 Avant se encontraba más de dos segundos por detrás, lo que equivale a una diferencia de longitud de aproximadamente una docena de autos.
El BMW se quedó con esta carrera
En el pasado, el icónico sistema Quattro de Audi le habría dado al RS4 una ventaja inicial y posiblemente la victoria. Sin embargo, los modelos M más recientes de BMW han incorporado su propia versión del sistema xDrive para optimizar la entrega de potencia a las ruedas, eliminando cualquier ventaja potencial que el Audi pudiera haber tenido en el pasado.
Esta carrera de resistencia no solo demuestra la superioridad del M3 Touring en términos de potencia bruta y aceleración, sino que también pone de relieve la constante evolución tecnológica que experimentan los autos deportivos. Los sistemas de tracción integral y las transmisiones cada vez más sofisticadas juegan un papel fundamental en el rendimiento de estos vehículos.
