Comprar un coche de segunda mano puede parecer la jugada perfecta para ahorrar sin renunciar a la movilidad. Los precios más bajos, la amplia variedad de modelos disponibles y el acceso a versiones mejor equipadas son algunos de los atractivos. Pero cuidado con cometer errores.
Aunque tenga sus añitos, la emoción por estrenar coche puede nublar el juicio. Entre vendedores hábiles, prisas por cerrar la operación y desconocimiento técnico, las meteduras de pata están a la vuelta de la esquina. Si estás pensando en hacerte con un coche usado, sigue leyendo: te contamos los 10 errores más comunes que cometen los compradores y cómo evitarlos.
1No inspeccionar el coche a fondo

Un error frecuente es confiarse con una simple mirada rápida. No es oro todo lo que reluce. Aunque la carrocería se vea bien, fíjate en los neumáticos, comprueba que las luces funcionen, que el aire acondicionado enfríe y que los frenos respondan como deben.
Abre el capó y mira el estado del motor, los niveles de aceite y refrigerante, y busca posibles fugas. Revisa también si hay desgastes que no coincidan con el kilometraje anunciado. Un volante pelado o un asiento muy hundido podrían indicar más uso del que parece. Investiga.