Los expertos preparadores de SpeedKore Performance engendran este salvaje Dodge Charger Hellucination de 1968 con 1.000 CV de puro músculo americano. Este bólido no es otra cosa que un espectacular Charger de 1968 construido íntegramente en fibra de carbono y propulsado por el radical motor V8 Hellephant de 1.000 CV.
Ha sido diseñado meticulosamente como la siguiente etapa en la evolución del puro músculo estadounidense. Hellucination es un Charger del 68 totalmente personalizado y lleva el atómico corazón Hellephant V8 supercharged de 1.000 CV. El equipo de expertos de Speedkore engendra este increible bólido para Ralph Gilles, el jefe de diseño de Stellantis.
Este clásico modelo americano es uno de los coches más codiciados y deseados en el mercado de segunda mano y más aún con esta exclusiva preparación. Este monstruo bien puede llevar el nombre de Hellucination, puesto que tiene el salvaje corazón Hellephant V8 de 1.000 CV (745 kW). Lleva una transmisión automática ZF de ocho velocidades que dan vida al espectacular conjunto. Esa potencia se transmite con impulso por todo el tren motriz y termina en las ruedas traseras. Estas gomas poco van a durar cuando pises el pedal del gas y quemes rueda.
La estética exterior del Dodge Charger 1968 Hellucination está completamente revestido en fibra de carbono y tiene un toque oscuro y siniestro. La carrocería y los pasos de rueda de este Charger estan construidos totalmente en este material ultraligero pero resistente.
