La noche nunca había brillado tanto en un reloj. TAG Heuer acaba de presentar el nuevo Mónaco Chronograph Night Driver Limited Edition (ref. CBL218E.FC6312), una pieza que convierte el icónico cuadrado de 1969 en un espectáculo de neón inspirado en las carreras nocturnas de Fórmula 1 y, muy especialmente, en el electrizante ambiente del Gran Premio de Las Vegas. Solo 600 afortunados podrán llevarse esta edición numerada que, literalmente, parece haber absorbido la luz de los casinos y el rugido de los motores bajo los focos.
Un degradado que hipnotiza en este TAG Heuer Mónaco
Olvida los diales clásicos. Aquí la esfera esqueletada es la auténtica protagonista. Un degradado hipnótico que arranca en un morado profundo en la zona superior y se funde progresivamente hacia un azul casi eléctrico en la parte inferior que recrea el cielo nocturno de Nevada cuando los Fórmula 1 recorren la recta principal. Los índices aplicados y las agujas se recargan con Super-LumiNova en tonos morado y azul que, en la oscuridad, reproducen la atmósfera de los letreros luminosos del Strip de Las Vegas. Y para rematar la fiesta visual, las agujas del cronógrafo aparecen en un turquesa vibrante que corta la esfera como un rayo láser.
Este juego de luces no es casual. TAG Heuer recupera el espíritu del legendario Monaco “Dark Lord” de los años ‘70 (aquel modelo negro mate que volvió locos a los coleccionistas) y lo lleva al siglo XXI con una dosis extra de atrevimiento cromático. El resultado es un reloj que de día resulta elegante y discreto, pero que cuando cae la noche se transforma en la pieza más magnética de cualquier terraza o paddock.
Una caja de 39 milímetros fabricada en titanio
El Mónaco siempre ha sido un reloj con carácter, pero esta versión lo lleva a otro nivel gracias a su caja de 39 milímetros fabricada en titanio grado 2 con revestimiento DLC de color negro. El acabado arenado le da un tacto casi sedoso y una presencia oscura que contrasta brutalmente con los destellos de color de la esfera. Pesa tan poco que casi olvidas que lo llevas puesto, algo que agradecerás tanto si estás varias horas al volante como si decides presumir de él en una cena interminable.
En el interior late el calibre TH20-00 de la emblemática manufactura suiza, un movimiento automático con cronógrafo que TAG Heuer estrenó hace apenas un par de años y que ya se ha ganado el respeto por su precisión y su arquitectura abierta. La masa oscilante esqueletada, visible a través del fondo de zafiro, también está tratada en negro para mantener la coherencia estética total black del conjunto.
Una correa a imagen y semejanza de este TAG Heuer
La correa combina caucho negro en la parte inferior (para ofrecer la máxima resistencia al sudor y al agua) con piel de becerro repujada en la superior, creando un relieve que recuerda a los asientos de los superdeportivos. El cierre desplegable de titanio con doble pulsador de seguridad es tan sólido como bonito, y permite cambiar la correa en segundos gracias al sistema de fácil intercambio.
Ficha técnica rápida
| Característica | Detalle |
|---|---|
| Referencia | CBL218E.FC6312 |
| Edición limitada | 600 unidades numeradas |
| Diámetro | 39 mm |
| Material caja | Titanio grado 2 con DLC negro |
| Movimiento | Calibre TH20-00 automático de manufactura |
| Funciones | Horas, minutos, segundos, cronógrafo |
| Reserva de marcha | 80 horas |
| Hermeticidad | 100 metros |
| Correa | Caucho y piel de becerro repujada |
| Precio | 11.400 € |
