¿Viajas en familia? Entonces seguro que piensas en destinos, paisajes y momentos compartidos. Sin embargo, existe un aspecto que debería estar siempre en primer plano: la seguridad infantil en el coche. No importa si la escapada es corta o el viaje nos lleva a la otra punta del país, proteger a los más pequeños durante el trayecto es una responsabilidad que no entiende de tiempos ni estaciones del año.
Olga, técnico en seguridad vial infantil y con más de una década de experiencia asesorando a familias, lo resume claramente: “El mejor viaje es aquel en el que llegamos todos sanos y tranquilos”. Y para lograrlo, recuerda cinco consejos esenciales válidos durante todo el año, sea otoño, invierno, primavera o verano. Cinco pautas que conviene interiorizar para que cada desplazamiento sea seguro como placentero.
1Elige el sistema de retención más adecuado
Seleccionar el modelo de silla correcta es la base de todo. No hay truco ni alternativa: el sistema de retención infantil debe estar homologado y adaptarse al peso, altura y edad del niño. En España, la normativa i-Size (ECE R129/03) es hoy la referencia más fiable, ya que tiene en cuenta la altura —un parámetro mucho más preciso que la edad— y garantiza pruebas de impacto más exigentes.
Olga insiste: una sillita elegida a ojo puede comprometer seriamente la seguridad. «Cada niño crece a su ritmo. Una silla demasiado grande o pequeña no solo es incómoda, también deja de proteger como debería». Por eso es esencial estudiar las diferentes etapas y asegurarse de que el modelo cubre las necesidades reales del menor.








