Las etiquetas medioambientales de la Dirección General de Tráfico (DGT) son de las pocas cosas en el terreno de la movilidad que no cambiarán a partir del 1 de enero de 2026. Ni tampoco se espera que lo hagan a corto plazo.
En los últimos meses, hemos oído hablar mucho de un nuevo criterio basado en el CO₂ para ‘conceder’ las etiquetas ECO y Cero de la DGT (las más favorables para evitar restricciones). Sí que habrá novedades en el acceso a las ciudades para vehículos sin distintivo ambiental o con etiqueta B, pero, de momento, no cambian los criterios para obtener una u otra pegatina.
1Las etiquetas de la DGT se mantienen como hasta ahora
Es cierto que se ha comentado mucho sobre un posible cambio en los criterios de las etiquetas medioambientales en el futuro, pero no va a entrar en vigor en el año 2026. No habrá revisión, reordenación ni cambios en los criterios de asignación de la etiqueta.
Para llegar a este punto, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha tenido en cuenta la opinión de fabricantes, asociaciones del sector y otros agentes implicados. El argumento principal es que tocar ahora un sistema que afecta a millones de vehículos y que regula el acceso a las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) podría generar un problema más grave del que pretenden resolver.
Para eso, habría que cambiar las normativas municipales, modificar los accesos, restricciones y sanciones de las ZBE y abrir la puerta a conflictos legales. Como si no hubiera suficientes, porque hay tribunales que siguen tumbando las multas.








