Al llegar diciembre, hay lugares mágicos que parecen transformar el frío en calidez y la rutina en ilusión. En la provincia de Burgos, donde la historia, la naturaleza y las tradiciones se enhebran como un tapiz perfecto, un pueblo está a punto de convertirse en protagonista absoluto de estas fiestas. Hablamos de Medina de Pomar, una joya de Las Merindades que este año aspira a brillar —literalmente— más que nunca.
Seleccionada para representar a Castilla y León en el famoso concurso ‘Juntos Brillamos Más’, de Ferrero Rocher, Medina de Pomar se prepara para vivir una Navidad de película si se alza con el ansiado premio: una iluminación navideña de ensueño. A pocos kilómetros en coche de muchos hogares del norte de España, esta villa burgalesa se convierte en una escapada perfecta que combina patrimonio, naturaleza y una magia muy especial.
3La esencia medieval que todavía late en sus calles
Caminar por Medina de Pomar es entender por qué es conocido como uno de los pueblos con más alma de Burgos. Todavía conserva parte de su trazado medieval y la huella de su antigua judería, detalles que convierten el paseo en un auténtico viaje temporal. El pasadizo de la Muralla es una de esas sorpresas que hacen que el visitante no quiera dejar de hacer fotos.
Otro de sus puntos imprescindibles es la ermita románica de San Millán, sobre todo para los amantes de la historia y del románico rural. ¿Sabías que algunos reyes, como Alfonso VIII, Isabel la Católica o Carlos I de España, descansaron entre esos muros en distintas épocas? Ya ves, a veces un pequeño desvío en coche nos lleva directos al corazón de la historia.








