El sonido de un motor que no arranca es de las peores formas de empezar el día. Una mañana cualquiera, giras la llave y el coche simplemente no responde. Miguel, mecánico de 37 años con más de una década en taller, lo tiene claro: «Si tienes ciertas marcas, hay más posibilidades de que la batería te deje tirado».
Lo que podría parecer una opinión anecdótica coincide, curiosamente, con los datos de un reciente estudio de Carly. La app de diagnóstico ha analizado miles de coches en España y ha encontrado diferencias significativas entre marcas en el estado de sus baterías. Casi cada cuatro coches sufre problemas en este componente. ¿Por qué? ¿Qué se puede hacer para evitarlo?
3¿Cómo influyen el clima y el uso urbano en las marcas?
El informe de Carly también señala factores ambientales que afectan directamente a la batería. En España, las temperaturas elevadas, los trayectos urbanos y el envejecimiento del parque automovilístico agravan el desgaste eléctrico. De hecho, los coches que circulan en grandes ciudades como Madrid o Barcelona presentan una proporción mayor de baterías con problemas.
Miguel lo ve cada día: “Aquí entran coches de todas las marcas, pero los que más sufren son los que apenas salen de la ciudad. Las temperaturas altas y el tráfico constante son una combinación letal. El calor acelera la evaporación del electrolito y los trayectos cortos impiden que se regenere la carga. Si a eso le sumas un mantenimiento escaso, el cóctel está servido”.







