Desde el lanzamiento de la primera generación del Kia Telluride allá por el año 2019, el inmenso SUV de la compañía coreana siempre ha sido el típico “tío para todo” de su segmento: enorme, capaz, confortable, prestacional y con un precio que hacía mucho daño a la competencia. Lo que nunca fue, hasta ahora, fue especialmente atractivo a la vista. Desde que apareció el impactante Kia EV9, el Telluride parecía como si el hermano mayor que se hubiera quedado un poco anticuado en la foto familiar. Kia ha decidido que eso se acabó.
La segunda generación del Kia Telluride llega ahora con una estética completamente renovada, mucho más cuadrada, imponente y moderna, sin copiar directamente al electrizante Kia EV9 pero bebiendo claramente de la misma filosofía de diseño “Opposites United” que bien caracteriza a los modelos más modernos de la compañía coreana. Las primeras imágenes oficiales, nos muestran un corpulento SUV que impone respeto nada más verlo, especialmente en su versión X-Pro, lista para salirse del asfalto sin problema alguno.
Un diseño más angular y personal para el nuevo Kia Telluride
El nuevo Kia Telluride abandona las formas redondeadas y algo genéricas del modelo saliente para abrazar un lenguaje mucho más geométrico. El capó es más plano, los pasos de rueda están sutilmente ensanchados y la cintura alta le da un aspecto de fortaleza difícil de igualar. Los faros verticales y con tecnología Full LED delante y detrás mantienen el ADN de la generación anterior, pero todo lo demás es nuevo.
El gran protagonista (y futuro foco de debate en redes) es la parrilla delantera. En las versiones normales aparece parcialmente carenada con finas barras verticales iluminadas que recuerdan vagamente al Kia EV9, pero en la variante X-Pro la cosa se pone seria: una enorme rejilla de bloques cuadrados, casi tipo “mad max”, combinada con ganchos de remolque a la vista y barras de techo reforzadas.
Por si todo esto no fuera suficiente, nunca está de más recordar las proporciones de las que presume el Kia Telluride, el buque insignia SUV de la casa coreana con sus 5,06 metros de largo. Para que lo puedas poner en perspectiva, es cuatro centímetros más largo que un Kia EV9, así como 24 centímetros más largo que un Kia Sorento. Sin olvidarnos de una anchura de 1,99 metros, una altura de 1,76 metros y de una distancia entre ejes de 2.970 milímetros.
Un interior mucho más tecnológico, espacioso y confortable
Si el exterior ya impresiona, el habitáculo da directamente un salto de categoría. La compañía coreana ha tomado la diseño del EV9 y lo ha adaptado a un coche de combustión con muy buen gusto. Dos pantallas de 12,3 pulgadas unidas bajo un mismo cristal forman un panel panorámico perfectamente rectangular, el volante pasa a ser de cuatro radios con un diseño mucho más futurista y el selector del cambio desaparece de la consola central para instalarse en la columna de dirección, liberando espacio y dando sensación de orden.
Las tres filas de asientos siguen siendo reales y ahora más amplias gracias a un crecimiento notable de cotas. Sobre todo destacar los 75 milímetros extra de batalla que gana este Kia Telluride, lo que se traduce en más espacio para piernas en la segunda fila y un maletero que gana enteros incluso con las siete plazas en uso. Aunque dependiendo del nivel de acabado, hay versiones incluso con configuraciones de ocho asientos.
El Kia Telluride despide a su legendario 3.8 V6 GDI

El cambio más radical en el Kia Telluride nos lo encontramos bajo el capó delantero. Y es que el veterano 3.8 V6 GDI con 295 CV de potencia dice adiós después de una vida honorable. En su lugar, la compañía coreana se ha animado por colocar una nueva familia de motores de cuatro cilindros, 2.5 litros y equipados con turbocompresor. Detalle que le permite ofrecer 278 CV de potencia y 420 Nm de par motor (65 Nm más que lo ofrecido por el 3.8 V6 GDI). Esas cifras se envían a sus ruedas delanteras o a sus cuatro ruedas dependiendo del acabado, por medio de una transmisión automática con 8 velocidades.
Pero la estrella de la gama será la variante híbrida, que recurre a ese mismo motor 2.5 Turbo, solo que acompañado de una máquina eléctrica que le ayuda a conseguir un total de 334 CV de potencia y de 460 Nm de par motor. Estos exclusivamente van a llegar junto con un sistema de tracción total, así como con una transmisión automática de seis velocidades. Sin dejar de lado una batería de iones de litio con 1,65 kWh de capacidad, que le ayudará a firmar un gasto medio en el ciclo EPA de 35 millas por galón (6,7 l/100 km). De ahí que se hable de un ahorro de entre 6 y 7 litros cada 100 kilómetros respecto al anterior V6 con tracción total, al igual que menciona una autonomía cercana a las 600 millas (casi 1.000 kilómetros).
Mención especial tienen los Kia Telluride X-Pro, que vienen equipados con el sistema de tracción a las cuatro ruedas que incluso añade un diferencial central bloqueable y un control electrónico que reparte par no solo entre ejes, sino también entre ruedas del mismo eje. No faltan tampoco unos neumáticos off-road de serie y 230 milímetros de altura libre al suelo para convertirlo en una versión que no teme a abandonar el asfalto.
Los X-Pro serán la estrella para los más aventureros

Aunque pierde algo de capacidad de remolque respecto al desaparecido V6 (de 2.495 a 2.265 kilos en el mejor caso), el nuevo Kia Telluride sigue siendo un verdadero titán para remolcar barcos, caravanas o lo que haga falta. La suspensión trasera autonivelante opcional mantiene la carrocería horizontal aunque vayas cargado hasta las cejas.
La versión híbrida incluye además el modo “Camp” o “Mantenimiento”: con el coche parado puedes mantener el aire acondicionado, luces y sistema de infoentretenimiento funcionando hasta 20 minutos (o hasta que la batería baje al 20 %) sin necesidad de tener el motor térmico encendido. Ideal para una parada en ruta o una noche de acampada sin gastar una gota de gasolina.
Desafortunadamente no verás este Kia Telluride por aquí

Kia ha presentado oficialmente el Telluride en el Salón de Los Ángeles que acaba de abrir sus puertas hasta el 30 de noviembre. Ahora bien, las primeras unidades llegarán a los concesionarios en el primer trimestre de 2026, de ahí que los precios todavía no se hayan anunciado, pero todo apunta a que el salto generacional vendrá acompañado de un pequeño incremento que no será determinante para que siga manteniéndose como una de las opciones más razonables entre los SUV grandes de siete plazas al otro lado del océano.
Fotos: Kia












































































