Lucía tiene 32 años y trabaja desde hace cinco como técnico de ITV en una de las estaciones de la Comunidad de Madrid. Acostumbrada a lidiar cada día con cientos de vehículos, confiesa que el pasado verano se sorprendió con un dato que no esperaba: más del 80% de los coches que pasaron por las líneas de inspección superaron la prueba a la primera. Para alguien que conoce de primera mano los defectos más habituales de los automóviles, se trata de una cifra que no deja de llamarle la atención.
Ese “alucine”, como ella misma lo define, tiene un trasfondo muy revelador: cada vez más conductores se toman en serio el mantenimiento de su vehículo, conscientes de que la ITV no es un simple trámite burocrático, sino una herramienta vital para garantizar su seguridad y la de todos en la carretera. Y aunque todavía hay un porcentaje de coches que suspenden, el hecho de que la gran mayoría la supere en la primera revisión habla de un cambio de mentalidad que merece la pena analizar.
4La concienciación social, clave en el cambio

Jorge Soriano, presidente de AEMA-ITV, lo expresa con claridad: “Tenemos que seguir trabajando en la concienciación de la sociedad sobre la contribución de la ITV a la seguridad vial y la protección del medio ambiente”. Y lo cierto es que la campaña parece dar frutos. El hecho de que ocho de cada diez coches pasen a la primera muestra que los conductores están más atentos al estado de sus vehículos.
Además, la ampliación de la red de estaciones en Madrid facilita que los conductores encuentren una opción cercana para pasar la inspección. Con más de 70 estaciones disponibles, incluidas aquellas situadas en zonas de bajas emisiones, el acceso al servicio es más sencillo que nunca. Eso ayuda a que menos conductores caigan en la tentación de retrasar la cita o circular sin la ITV en vigor.