Antonio lleva más de 20 años trabajando en un taller especializado en neumáticos, y sabe ‘leerlos’ mejor que nadie. Esta vez, no hace ninguna recomendación sobre cada cuánto tiempo cambiarlos ni cuál es la profundidad del dibujo mínima. Ahora, insiste en cuáles son las mejores ruedas para el otoño.
Aunque la mayoría llevemos los mismos neumáticos durante todo el año, los conocidos como ‘All Season’ o 4 estaciones, la realidad es que hay ruedas de verano y de invierno. No en todos los coches tiene el mismo sentido, pero si vives en una zona muy lluviosa o de montaña, incluso si viajas a menudo por este tipo de lugares, sí que deberías equipar a tu coche con unas ruedas de invierno.
«El otoño no perdona. Ni a las ruedas gastadas, ni a los que no revisan la presión«, insiste este mecánico.
Por qué deberías cambiar de ruedas en otoño

¿Crees que el asfalto es el mismo en julio que en noviembre? Nada de eso. Lo más evidente es que bajan las temperaturas, pero en otoño también hay más humedad, hojas de los árboles y en muchos rincones de España, llegan las primeras lluvias de la temporada. Como consecuencia, el caucho de las ruedas pierde elasticidad y se reduce el agarre. Y si a eso le sumas lluvia, hojas, pasos de cebra que resbalan y que las frenadas son más largas, puedes llevarte más de un susto.
Antonio también insiste en otra cuestión que no todos los conductores tienen en cuenta, y es que la presión cae unos 0,1 bares por cada 10 grados menos de temperatura, así que eso lógicamente hace que el coche gaste más y pierda grip. Este mecánico recomienda revisar la presión en otoño cada dos semanas, más o menos.
Entonces… ¿Sirven las ruedas de verano en otoño? «Depende. Si vives en una zona templada y apenas llueve, puedes alargarlas un poco. Pero si vives en una zona de montaña y llueve mucho, necesitas unas ruedas que se adapten mejor», explica. En el primer caso, los neumáticos ‘All Season’ son suficientes, pero en el segundo es mucho mejor que lleves unos neumáticos de invierno.
Los neumáticos más recomendables en otoño (y cómo cuidarlos)

«En otoño, el coche tiene que estar preparado para todo, y eso empieza por las ruedas», explica. Si vives en el norte o en zonas de montaña, afirma que las ruedas de invierno son la mejor opción, porque la goma es más blanda y mantienen la adherencia incluso con temperaturas bajas. En cambio, en las ciudades que tienen un clima más suave, los neumáticos ‘All Season’ son suficientes.
En lo que también insiste, independientemente del tipo de ruedas, está en el mantenimiento. Hay que vigilar la profundidad del dibujo, pues aunque legalmente tiene que ser superior a 1,6 mm, lo recomendable es que no baje de 3 mm. También cualquier signo de desgaste irregular o una alineación incorrecta.
Revisa cualquier pequeña grieta o deformación, porque puede terminar en un reventón. «No hace falta ser mecánico, basta con agacharse y mirar bien todas las ruedas en poco más de un minuto», añade Antonio.
Otro consejo que no todo el mundo tiene en cuenta: ajusta la presión siempre con el coche en frío y según la carga. Si en otoño haces viajes más cortos y las temperaturas cambian mucho, las ruedas tienden a perder aire más rápido. Evita también los bordillos y cualquier giro brusco en seco, porque en esta época el neumático se endurece y sufre más.
«Las ruedas son el único punto de contacto entre el coche y el suelo. No intentes ahorrar justo ahí«, señala para cerrar su recomendación.







