La DGT acaba de reconocer algo de lo que todo el mundo lleva hablando meses. Un aspecto relacionado con las nuevas balizas de emergencia que serán obligatorias dentro de un mes.
Es un dato que en los círculos técnicos, los agentes de tráfico e incluso el público general se lleva diciendo, y que por fin ha salido a la luz pública de manera oficial. No te vas a sorprender cuando veas lo que es, aunque lo que sorprende de verdad es que la DGT lo reconozca.
2¿Por qué sigue la DGT adelante con la medida?
Llegados a este punto es muy probable que te estés preguntando si todo esto ha sido una estafa o si merece la pena gastar el dinero en un dispositivo que apenas se ve cuando hace sol. La respuesta de la DGT es que hay razones más allá de si la luz se ve a 50 o a 1000 metros.
La razón por la que la DGT insiste en su implantación de cara a 2026, es que se trata de un sistema de seguridad mucho más complejo y efectivo por la conectividad. Aquí es donde entra en juego el concepto de la nube y la plataforma DGT 3.0.
Cuando activas una baliza V16 conectada, el dispositivo envía una señal de datos a la nube de la DGT indicando tu posición mediante GPS. Una vez que la DGT recibe tu posición, esa información se comparte en tiempo real con los paneles de mensaje variable de la carretera y, lo que es más importante, con los navegadores y sistemas de a bordo de los coches que se acercan a tu posición.
Esa notificación llega con mucha más antelación que cualquier señal visual física, permitiendo al conductor prepararse, cambiar de carril o reducir la velocidad cientos de metros antes de tener contacto visual contigo. Ese es el motivo por el que la limitación de los 50 metros, aunque real y preocupante, no implica un problema real según la DGT.








