El Rally Dakar no es una carrera cualquiera. Es el examen definitivo en cuanto a resistencia, valentía y fiabilidad para el ser humano y la máquina. Y desde el año 2025, la marca británica Defender, sinónimo de aventura en estado puro, se ha posicionado como patrocinador oficial y proveedor clave de esta legendaria competición automovilística off-road. Su compromiso con el Dakar va mucho más allá de plasmar su logo en el dorsal de los participantes. Muestra de ello es que Defender entrega una flota exclusiva de seis unidades altamente preparadas que serán el arma secreta de los organizadores durante los próximos cuatro años.
Curiosamente los dos primeros ejemplares ya están en plena acción, recorriendo el inmenso desierto de Arabia Saudí para definir cada curva, cada duna y cada trampa de la ruta del Dakar 2026. Porque en esta prueba no hay margen para el error: miles de kilómetros en apenas dos semanas, terrenos que cambian en cuestión de segundos y condiciones que pondrían contra las cuerdas al vehículo más duro del planeta.
Estos vehículos toman como punto de partida un Defender 110 P300
Los encargados de validar la ruta son los oficiales de reconocimiento, auténticos exploradores que pasan semanas enteras al volante antes de que arranque la competición. Su misión: probar cada kilómetro de etapa para garantizar que sea viable, desafiante y, sobre todo, segura para los cientos de participantes. Y para esa tarea titánica, nada mejor que un Defender debidamente transformado en una auténtica bestia de competición.
Estos impresionantes vehículos toman como punto de partida un Defender 110 en su versión P300, lo que conlleva esconder bajo su capó delantero un motor de gasolina con cuatro cilindros y capaz de proporcionar 300 CV de potencia a 5.500 rpm y 400 Nm de par motor entre 1.500 y 4.500 rpm. Esas cifras son enviadas a su sistema de tracción a las cuatro ruedas, en el que no faltan diferentes bloqueos de diferenciales, por medio de un cambio automático que tiene ocho velocidades y también reductora. Pero lo que es verdaderamente especial en estas máquinas son las mejoras que la compañía británica ha realizado para convertirlo en una máquina perfecta para el desierto.
Una interminable lista de mejoras que potencian su capacidad off-road
Como no podía ser de otra manera, la seguridad juega un papel fundamental en estos imponentes Defender, de manera que lo primero que se ha instalado es una contundente jaula de seguridad integral que protege todo el habitáculo, que curiosamente presenta una configuración con solo tres plazas (tal y como ocurre con los 90 y los 110 Hard Top) para maximizar el espacio de carga y transportar todo lo necesario para aventurarse en expediciones de larga duración. Sin embargo, esos asientos se han equipado también con arneses de competición de cuatro puntos.
El motor que anima a estas criaturas también recibe un kit de refrigeración reforzado y un snorkel con prefiltro ciclónico que asegura que el aire llegue limpio incluso en tormentas de arena a su propulsor. Los neumáticos all-terrain montados en llantas de 18 pulgadas, amortiguadores calibrados para competición, protecciones inferiores blindadas y puntos de recuperación elevados completan un chasis preparado para lo peor.
Estos Defender tienen un depósito de gasolina de 90 litros… que no son suficientes
Para soportar las noches en pleno desierto, estos Defender llevan una baca con capacidad para 132 kilos, depósito auxiliar que extiende la autonomía hasta los 700 kilómetros (de serie los 110 P300 tienen un tanque de 90 litros), kit completo de rescate con placas de arena, herramientas, repuestos, nevera portátil, iluminación extra y un práctico depósito de agua de 40 litros que permite una ducha improvisada tras jornadas interminables.
Una vez que la ruta queda cerrada –y sus secretos se guardan bajo siete llaves hasta el briefing de cada etapa–, estos mismos Defender pasan abriendo camino en la carrera real, liderando la salida de los competidores y marcando el ritmo inicial en cada una de las jornadas del Dakar.
Hasta la edición de 2028 Defender y Dakar tienen un acuerdo de colaboración
Pero la implicación de Defender no termina ahí. Como vehículo oficial del Rally Dakar, la marca pone a disposición de la competición una impresionante flota de automóviles adicional que se usa para transportar a organizadores, comisarios y prensa VIP durante toda la prueba, asegurando una movilidad fiable en los puntos más remotos del recorrido.
Esta alianza, que arrancó con la edición 2025 y se extenderá al menos hasta 2028, refuerza el ADN aventurero de Defender: un icono nacido para lo imposible que ahora demuestra, una vez más, que está listo para escribir nuevas páginas en la historia del motorsport más extremo del mundo. Porque si alguna vez te has preguntado qué vehículo elegiría el propio Dakar para preparar su terreno, la respuesta es clara: el Defender. Ya que cuando el desierto pone a prueba los límites, solo los más duros sobreviven.
Fotos: Defender
