La segunda generación del Captur da un salto cualitativo enorme, hasta el punto de parecer un vehículo de un segmento superior al que sustituye. Este vallisoletano promete.

Publicidad

Prueba Renault Captur TCe 130 EDC. Habitáculo

Prueba Renault Captur TCe 130 EDC. Interior

Prueba Renault Captur TCe 130 EDC. Exterior

Artículo anteriorPrueba Renault Captur TCe 130 EDC. Habitáculo
Artículo siguientePrueba Kia XCeed 1.6 CRDI 136 Emotion DCT. Exterior