El nuevo Citroën C4 Cactus mantiene la originalidad pero suaviza sus formas. El sorprendente motor y la caja automática EAT6 multiplican el agrado.

Publicidad
Artículo anteriorImágenes bajo la lupa. Seat Ibiza 1.0 TSI 25.000 kilómetros
Artículo siguientePrueba Citroën C4 Cactus Puretech 110. Interior