El dron, un DJI Phantom 4 con una altura máxima de 6000 metros, resulta clave para la función de rescate. Este aparato pesa solo 1380 gramos, puede volar a velocidades de hasta 20 metros por segundo durante casi 30 minutos y envía imágenes al prototipo. Estas aparecen en una pantalla HD retráctil escondida en el lateral de la plataforma de carga.