Era mayo de 1987 cuando el diseño del que iba a convertirse en el primer coche de Lexus llegaba a las manos de los altos ejecutivos de Toyota. Se conocía como 'F1' internamente y empezó a tomar forma antes incluso de que la compañía tuviera siquiera un nombre. 2 años después, en Detroit, el lujoso sedán hacía su presentación al mundo con el nombre LS 400 en su carrocería.