El camino hacia la movilidad eléctrica está lleno de entusiasmo, pero también de incertidumbres. La autonomía, el coste de uso, el confort o incluso la compatibilidad con el día a día generan todavía recelos en muchos conductores. Consciente de estas dudas, Peugeot lanza la campaña E-Relax, una propuesta inédita en el mercado español que ofrece a los particulares la posibilidad de probar un turismo eléctrico durante tres meses y, si la experiencia no les convence, cambiarlo por otra versión híbrida, híbrida enchufable o de combustión tradicional.
La apuesta de la marca se resume en un eslogan directo: «Lo puedes devolver, pero no vas a querer». Detrás de este mensaje hay una convicción firme: quienes prueben un eléctrico de la gama Peugeot difícilmente querrán volver atrás.
La confianza de una gama líder
Lejos de ser una maniobra de marketing coyuntural, E-Relax se apoya en una gama 100% eléctrica de las más amplias en Europa dentro de una marca generalista. El catálogo de la marca francesa incluye opciones para todos los perfiles: desde el urbano E-208, pasando por los compactos E-308 y E-308 SW, el estilizado fastback E-408 y hasta una completa oferta SUV con los E-2008, E-3008 y E-5008.
Esta diversidad no solo permite cubrir distintas necesidades de movilidad, sino que transmite un mensaje claro: la electrificación no es una alternativa lejana ni restringida a unos pocos, sino una realidad tangible y adaptada a todos los estilos de vida.
Además, la marca respalda su propuesta con un paquete de garantías y servicios que refuerzan la tranquilidad del cliente: ocho años de garantía Peugeot Care, otros ocho de garantía específica para la batería, un punto de carga incluido y la tarjeta RFID Charging Pass, que facilita el acceso a la red de recarga.
Una campaña para despejar dudas
El valor diferencial de E-Relax radica en ofrecer a los clientes libertad de elección sin presión. Al adquirir un modelo eléctrico financiado a través de Stellantis Financial Services, los compradores particulares dispondrán de tres meses para convivir con su vehículo y descubrir cómo se adapta a su rutina.
Si tras ese tiempo el cliente prefiere otro tipo de motorización, puede cambiarlo. Sin penalizaciones. Sin riesgo. Sin temor a una decisión precipitada. Un gesto que demuestra la plena confianza de la marca en la calidad, prestaciones y eficiencia de sus eléctricos.
El fabricante es consciente de que las barreras hacia la electrificación no son tanto técnicas como psicológicas. La experiencia de conducción silenciosa, el par motor inmediato, los costes reducidos de uso y mantenimiento, y la libertad de acceso a las zonas urbanas restringidas son ventajas que, en la práctica, convencen a la mayoría de quienes prueban esta tecnología.
Un paso hacia la movilidad del futuro
Con E-Relax, PEUGEOT no solo refuerza su papel como pionero en electrificación, sino que también lanza un mensaje claro al mercado: la transición hacia la movilidad eléctrica puede ser gradual, acompañada y sin miedo al error.
En un momento en el que la Unión Europea avanza hacia el fin de la venta de motores de combustión en 2035, iniciativas como esta ayudan a reducir la resistencia de los consumidores y aceleran el cambio cultural necesario.
La campaña también destaca por su carácter estratégico: al convertir la experiencia real de conducción en el principal argumento de venta, Peugeot logra algo que los anuncios o cifras técnicas por sí solos no pueden garantizar: confianza basada en la vivencia personal.
Una jugada maestra de marketing y compromiso
«Tu primer eléctrico con una promoción que no usarás». Con esta frase, la marca francesa resume con ironía el espíritu de E-Relax: ofrecer una garantía de devolución que, muy probablemente, nadie llegue a utilizar.
El resultado es doble. Por un lado, se eliminan los miedos y se invita a los clientes a dar el salto sin dudas. Por otro, se refuerza la imagen del fabricante francés como marca innovadora, transparente y segura de sí misma, convencida de que su gama eléctrica es capaz de conquistar a cualquier conductor.
