El mundo del automóvil eléctrico avanza a gran velocidad, y con él la necesidad de explorar nuevas soluciones estéticas y técnicas que permitan ampliar horizontes. En este contexto surge el EVX, un ejercicio conceptual de Italdesign encargado por Volkswagen Platform Business. El prototipo, que fue presentado en visualización holográfica en el IAA Summit de Múnich, se plantea como un estudio de diseño más que como un vehículo destinado a producción.
Un laboratorio de proporciones
El punto de partida del EVX ha sido la plataforma MEB (Modular E-Antriebs-Baukasten), la base sobre la que el Grupo Volkswagen desarrolla gran parte de su gama eléctrica. Italdesign ha trabajado sobre la evolución MEB+ con tracción delantera, dentro de la futura familia de eléctricos urbanos, y ha llevado a cabo un ejercicio de equilibrio de proporciones, adaptación de volúmenes y posibilidades formales.

El resultado es la visión de un coupé 2+2 de tres puertas, con una longitud de 4,23 metros, una anchura de 1,82 metros y una altura de 1,49 metros, asentado sobre una distancia entre ejes de 2,6 metros. Más allá de las cifras, lo relevante es la exploración de nuevas tipologías en torno a una plataforma concebida para ser flexible y escalable, capaz de responder a necesidades muy diversas en el mercado internacional.
Entre la tradición y la innovación
Fiel al espíritu de Italdesign, el proyecto no se limita a proponer un ejercicio estilístico. Incluye también un estudio preliminar de viabilidad técnica que asegura que las soluciones planteadas podrían materializarse en un vehículo real. Esta combinación de visión conceptual y pragmatismo técnico forma parte de la filosofía de la firma italiana desde su fundación, y ha sido clave en la creación de numerosos prototipos que han anticipado tendencias de diseño y producción.
En el EVX se percibe esa tradición: un vehículo que explora lo posible, sin romper con lo realista. No está pensado para un fabricante concreto ni para lanzarse al mercado, pero sí demuestra cómo el trabajo de diseño puede contribuir a ampliar la visión estratégica de un grupo automovilístico.
Una plataforma para todos
Uno de los puntos más destacados de este proyecto es su orientación hacia la adaptabilidad para fabricantes externos al Grupo Volkswagen. Italdesign (aquí parte de sus grandes obras) ha querido subrayar cómo la arquitectura MEB puede convertirse en un recurso abierto, capaz de responder a diferentes contextos industriales y comerciales. En un mercado global donde cada región demanda soluciones específicas, esa capacidad de ajuste resulta clave para garantizar la competitividad.
Así, el EVX no es solo una propuesta estética: es también un manifiesto sobre cómo la ingeniería de plataformas puede ser un activo estratégico de gran valor, más allá de los límites de una sola marca.
Una demostración de capacidades digitales
Otro aspecto en el que el EVX pone el acento es en el trabajo del equipo CAS (Computer Aided Styling) de Italdesign. Bajo plazos ajustados, el estudio ha demostrado un alto nivel en la transformación de visiones conceptuales en modelos 3D refinados, listos para ser comunicados en entornos de última generación como la visualización holográfica que se empleará en Múnich.

Este detalle no es menor: en una industria cada vez más digitalizada, la capacidad de pasar del concepto al modelo virtual con rapidez y calidad se convierte en un factor diferenciador. Italdesign refuerza así su reputación como centro de excelencia no solo en diseño tradicional, sino también en innovación tecnológica aplicada al desarrollo de automóviles.
Italdesign dentro del Grupo Volkswagen
El EVX refleja la doble naturaleza de Italdesign: por un lado, como socio estratégico del Grupo Volkswagen, aportando valor en proyectos que buscan explorar nuevas posibilidades; por otro, como puente hacia fabricantes externos, mostrando que las tecnologías del consorcio pueden tener aplicaciones más amplias.
De este modo, el estudio conceptual se convierte en un recordatorio de que Italdesign no solo crea formas bellas, sino que también desempeña un papel esencial como catalizador de innovación, generando sinergias entre ingeniería, diseño y estrategia empresarial.
Una ventana al futuro

En definitiva, el Italdesign EVX es mucho más que un coupé conceptual: es un laboratorio de ideas sobre la movilidad eléctrica, la adaptabilidad de las plataformas modulares y la importancia de integrar el diseño con la ingeniería. Su presentación en holografía no es casual, sino un guiño al futuro de la comunicación en el sector automotriz.
En un momento en que la electrificación redefine las reglas del juego, proyectos como este recuerdan que el diseño sigue siendo la herramienta más poderosa para imaginar lo que aún no existe, pero podría estar a la vuelta de la esquina.