El año pasado este impresionante Volkswagen ID.R sorprendía al mundo entero firmando un nuevo récord en la emblemática subida al Pikes Peak. Pilotado por Romain Dumas, este bólido eléctrico conseguía parar el crono en 7 minutos y 57,148 segundos. Ahora los ingenieros de la firma alemana están poniendo a punto esta criatura para que también consiga coronarse como el eléctrico más rápido en el circuito alemán de Nürburgring.
Varía su electrónica y su aerodinámica
Con el fin de abordar una vuelta de infarto a este circuito de 20,8 kilómetros de recorrido y ubicado a unos 600 metros sobre el nivel del mar (Pikes Peak se acaba por encima de los 4.300 metros), Volkswagen ha tenido que revisar por completo la gestión electrónica de sus dos motores, capaces de generar un total de 500 kW, el equivalente a unos 680 CV de potencia. Pero eso no es todo.
Su aerodinámica también sufrirá drásticas variaciones, comenzando por un alerón posterior que ha requerido cientos de horas de desarrollo en el túnel del viento. Inspirado en el que utilizan los monoplazas de Fórmula 1, este alerón añade la función DRS, que reduce la fuerza aerodinámica en un 20%, de forma que el Volkswagen ID.R podrá alcanzar su velocidad máxima más rápido y utilizando menos energía de sus baterías.
Y por si esto fuera poco, también hay nuevos elementos aerodinámicos, los cuales han sido impresos con tecnología 3D.
Gracias a todas estas mejoras, este ID.R saldrá a pista con el NIO EP9 a la vista. Y es que este deportivo 'made in China' es el eléctrico más rápido en Nürburgring, firmando un tiempo de 6 minutos y 45,9 segundos.
Si bien, la firma alemana no le teme a nada y avisan de que el tiempo de esta criatura eléctrica podría quedar realmente cercana a los 5 minutos y 19,55 segundos que consiguió este radical Porsche 919 Hybrid Evo siendo pilotado por Timo Bernhard en Nürburgring. Y que a día de hoy, es la vuelta más rápida de la historia de este singular trazado.