No es la primera vez que hablamos de los Porsche 911 preparados por Kalmar Automotive. El especialista nórdico nos tiene acostumbrados a sacar la quintaesencia de los deportivos de Stuttgart, independientemente de que sean clásicos o modernos, buscando la esencia de la conducción análogica y de la sensación de aventura.
Una de sus creaciones es el Kalmar 7-97, un homenaje al Porsche 911 ST original de la década de 1970, diseñado para proporcionar niveles de rendimiento de vehículos deportivos modernos con el estilo de un icónico clásico cuya carrocería se recrea en fibra de carbono para buscar la máxima ligereza posible.
Lo que no sabíamos es que uno de los admiradores de las creaciones del danés Jan Kalmar era otro auténtico fanático de los Porsche 911. Y es que el especialista norteamericano Bruce Canepa –famoso por sus actualizaciones del 959– ha encargado el flamante Kalmar 7-97 que ves en las fotos que acompañan este texto para su colección particular.
Así es el Porsche 911 de Kalmar para Bruce Canepa
Se trata del 7-97 más impresionante fabricado hasta el momento –se producen no más de 12 unidades anuales–. Viene equipado con la nueva especificación de motor Triple 4, lo que quiere decir que su bóxer de seis cilindros refrigerado por aire y colgado en el voladizo trasero cubica cuatro litros y genera más de 400 Nm, que se traducen en una potencia superior a los 400 CV. Cuenta además con tracción total y con sistema de elevación del eje delantero, frenos cerámicos y muchas más “chuches”.
Este vehículo está basado en el Porsche 993 (1994-1998), pero su carrocería de fibra de carbono es un fiel reflejo de la de los Porsche 911 clásicos (1964-1989), si bien se ha “depurado” con la eliminación, por ejemplo, de los vierteaguas laterales sobre las ventanillas. No falta tampoco un capó delantero rediseñado, y se montan también ventanillas de mayor aislamiento acústico.
Dicho todo esto, el objetivo de cada unidad fabricada del Kalmar 7-97 es rendir homenaje a la herencia y el estilo del Porsche 911 ST de la década de 1970, independientemente de que se opte por la carrocería coupé –como en este caso–, por el cabriolet, por la variante targa o, incluso, el coupé con especificaciones RS-R.
Más detalles de este Porsche 911 preparado por Kalmar
Como ya hemos visto, el motor original ha sido profundamente modificado, lo que incluye la adopción de un cigüeñal del 997 GT3 –principal responsable del aumento de cilindrada–, acelerador electrónico con control específico para cada inyector, taqués mecánicos, un sistema de escape mejorado, doble radiador de aceite, una unidad de gestión electrónica del motor Motec M150 con interfaz OBDII y un sistema de filtrado de aire diseñado ad hoc. Con todo ello se logran 401 hp (406 CV) y 426 Nm.
La suspensión recibe elementos activos y un eje trasero multibrazo. Se instala, además, una caja de cambios de seis velocidades, una batería de litio ultraligera y llantas de tres piezas estilo Fuchs. El sistema de control de tracción opcional con modo deportivo, frenos cerámicos y elevación del eje delantero son otras de las características de esta preparación.
En el interior de este 7-97 encontramos asientos deportivos Recaro de cuero y dos airbags (opcionales) perfectamente adaptados al estilo del salpicadero del Porsche 911 clásico (modelo F). No falta tampoco el cierre centralizado remoto, el aire acondicionado, la dirección asistida, un sistema de audio Bluetooth oculto ni el limpiaparabrisas con sensor de lluvia. Incluso la llave es digna de mención, ya que ha sido diseñada expresamente para Kalmar e incorpora botones para abrir y cerrar el maletero delantero y el portón trasero.
Con todo ello, el peso de este Porsche 911 con tracción es de sólo 1.215 kg, y puede rebajarse hasta los 1.150 kilos si se opta por la versión de tracción trasera o aligerarse aún más si se pide específicamente y se renuncia a diversos elementos de confort. Puede ser una gran idea para los más puristas, si bien a nosotros, tal y como está este vehículo nos parece perfecto.
