Hace exactamente un siglo, el Bugatti Type 35 se convirtiĆ³ en el superdeportivo de la Ć©poca. Hoy las escasas unidades supervivientes de esta joya de la ingenierĆa se cotizan a precios muy dispares debido a sus enormes diferencias en cuanto a estado de conservaciĆ³n, rareza y originalidad de sus componentes, ya que no hay que olvidar que prĆ”cticamente todos los Bugatti Type 35 tuvieron una vida mĆ”s o menos exitosa en el mundo de la competiciĆ³n.
Aun asĆ, baste decir que el ejemplar mejor pagado en subasta se vendiĆ³ en agosto de 2021 por 5.615.000 dĆ³lares, equivalentes hoy a unos 5.245.000 euros en Pebble Beach (California, EE. UU.), a cargo de Gooding & Company. Esto quiere decir que un buen ejemplar del clĆ”sico Bugatti Type 35 cuesta mĆ”s que la mayorĆa de las unidades de los modernos Bugatti construidos en la actualidad.
Sobre Ettore Bugatti y el Bugatti Type 35
En cualquier caso, los responsables de la marca francesa nos recuerdan que el Bugatti Type 35 sorprendiĆ³ a sus rivales no sĆ³lo por su diseƱo e ingenierĆa superiores, sino gracias tambiĆ©n a un programa de mejora continua.
Y es que cuentan sus biĆ³grafos que Ettore Bugatti no le temĆa a nada. MĆ”s allĆ” de sus excepcionales habilidades de cara al diseƱo ācuando se creĆ³ este Bugatti Type 35 no habĆa ningĆŗn modelo de automĆ³vil ni remotamente parecidoā su visiĆ³n y valentĆa para desafiar los principios de la ingenierĆa convencionales de la Ć©poca fueron la clave para crear este automĆ³vil, que no era una copia o una evoluciĆ³n de ālo que habĆaā, sino un concepto completamente rupturista. āLe Patronā era un hombre acostumbrado a buscar sus propios lĆmites, exigiĆ©ndose a sĆ mismo el mayor esfuerzo y pidiendo el mismo compromiso a todo el equipo Bugatti en una incesante bĆŗsqueda de la perfecciĆ³n.
Esa bĆŗsqueda y esa autoexigencia mĆ”xima fueron claves en el idilio entre Ettore Bugatti y la competiciĆ³n. Pero habĆa algo mĆ”s que pasiĆ³n en ese afĆ”n por competir al mĆ”ximo nivel. Y es que Bugatti fue uno de los primeros fabricantes de automĆ³viles en comprender los beneficios comerciales de la publicidad que se obtiene al triunfar en los circuitos y en las carreras en carretera abierta mĆ”s afamadas de Europa y al imponerse a sus rivales.
Pero aunque Bugatti tenĆa plena confianza en las capacidades de su nuevo vehĆculo, seguramente nunca llegĆ³ a imaginar que el Type 35 lograrĆa 2.500 victorias a lo largo de su periodo activo, convirtiĆ©ndose en el coche de carreras mĆ”s exitoso de todos los tiempos.
AsĆ es el Bugatti Type 35
Ettore Bugatti sĆ sabĆa, desde luego, que habĆa diseƱado un autĆ©ntico purasangre, pero tambiĆ©n era consciente de que sus rivales no se quedarĆan parados, y continuĆ³ desarrollando el vehĆculo incansablemente, lo que contribuye a que, a dĆa de hoy, no haya dos unidades iguales de este deportivo.
Equipado con un motor de ocho cilindros y 1.991 centĆmetros cĆŗbicos, en 1924 el primer Bugatti Type 35 alcanzaba 90 CV con sus especificaciones de carrera. Dos aƱos mĆ”s tarde, el motor habĆa crecido hasta cubicar 2.262 cm3, y su potencia habĆa aumentado notablemente. Acababa de nacer el Bugatti Type 35T, especĆficamente evolucionado para plantar cara a sus rivales en la legendaria Targa Florio (Italia), donde logrĆ³ la victoria seguido de dos Type 35 con motor de dos litros.
Siempre buscando el mayor rendimiento y consciente de que los motores no podĆan crecer en cilindrada de forma ilimitada, Ettore Bugatti desarrollĆ³ su propio compresor de la mano del destacado ingeniero italiano Edmond Moglia, con una inusual configuraciĆ³n de tres rotores. El compresor se instalaba en el exterior del motor, con una vĆ”lvula de descarga sobre el colector cuya salida obligaba a practicar un orificio en el capĆ³ que hace fĆ”cilmente reconocibles las primeras versiones sobrealimentadas de los Bugatti Type 35.
Hubo muchas mĆ”s innovaciones tecnolĆ³gicas a lo largo de la vida del Bugatti Type 35. A finales de 1926 se lanzĆ³ la especificaciĆ³n Type 35TC āpor Compresor y Targaā, mientras que un aƱo mĆ”s tarde aparecerĆa la versiĆ³n Type 35B, distinguible por su radiador sobredimensionado. Aquella versiĆ³n llegaba a producir 130 CV, gracias a los cuales el vehĆculo desarrollaba una velocidad mĆ”xima de mĆ”s de 205 km/h.
A finales de 1930, el Bugatti Type 35B habĆa evolucionado hasta lo que muchos consideran su especificaciĆ³n definitiva, con culata de doble Ć”rbol de levas, pistones y cĆ”maras de combustiĆ³n esculpidas, asĆ como infinidad de mejoras en suspensiones, frenos y un largo etcĆ©tera. Aquella versiĆ³n desarrollaba 140 CV.
Conmemorando el centenario de esta joya mecĆ”nica, en Bugatti nos recuerdan que en la actualidad, en Molsheim, dentro del Bugatti Atelier, cada unidad de los Bugatti contemporĆ”neos se ensambla a mano con la misma bĆŗsqueda de la perfecciĆ³n que Ettore Bugatti, āLe Patronā, buscaba en su Type 35, en el coche de carreras mĆ”s laureado del mundo.