El nuevo Mercedes-Benz GLA monta motores diésel y de gasolina de cuatro cilindros, que ofrecen una mayor eficiencia y menores emisiones. El propulsor de acceso de gasolina es el M 282 con 1,33 litros de cilindrada que se incorpora en el GLA 200. Genera 163 CV de potencia y 250 Nm de par motor, y está asociado a un cambio automático 7G-DCT de doble embrague que envía la potencia al tren delantero. La opción más potente es el GLA 35 4Matic AMG, con un motor de 2.0 litros y 306 CV de potencia. También está disponible el eficiente GLA 250 e, una versión con tecnología EQ Power.
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