El Gran Premio de Gran Bretaña de Silverstone fue la primera de las siete carreras del primer Campeonato Mundial de Fórmula 1 de la FIA, en 1950. Cuatro modelos Alfa Romeo Alfetta 158 se encargan de ocupar los primeros cuatro puestos en la parrilla. Farina se hizo con la pole position, la vuelta rápida y la victoria final. Segundo llegó Luigi Fagioli y tercero Reg Parnell.