Kia tiene un filón en el Sportage, un modelo que desde su primera generación -lanzada en 1993- ha conquistado a más de cinco millones de clientes y que se ha convertido en el modelo más vendido de la marca, pues un 26 por ciento de los coches comercializados por Kia han sido Sportage. Por eso, cualquier cambio o retoque en un modelo que representa tanto en una marca, debe ser realizado con mucho mimo. Así ha sido en esta actualización del Sportage, que no solo ha sido retocado con mimo en el aspecto estético sino que también se ha reforzado con elementos de seguridad y ayuda a la conducción o con una gama de motores que se ha visto renovada y a la que se suman nuevos sistemas enfocados a conseguir las mejores cifras en lo relativo a consumos y emisiones. Su gama de precios arranca en poco más de 18.000 euros sumando todos los descuentos y con un equipamiento ya muy completo en el que no faltan 8 airbags, control electrónico de estabilidad, control de descenso de pendientes, sistema de arranque en pendiente, control de tracción, barras de techo, luces LED, volante y palanca de cambios en cuero, cámara trasera, sistema de infoentretenimiento con pantalla de 7 pulgadas, aire acondicionado o control de crucero y sensor de luces.