Para trasladarnos emocionalmente al momento de la historia en el que los superdeportivos no contaban con mecánicas híbridas, ni propulsores eléctricos, este radical Apollo Intensa Emozione apuesta por un sobrenatural propulsor 6.3 V12 atmosférico, el cual es capaz de generar la friolera de 780 CV de potencia cuando gira a 8.500 rpm y de 760 Nm de par motor a 6.000 rpm. Pero eso no es todo, porque este corazón es capaz de llegar a las 9.000 rpm para emitir música celestial por su sistema de escape con unos terminales de diseño futurista.