Tras instaurarse en países como Italia, Alemania, Francia o Reino Unido, E-GAP acaba de aterrizar en España. Y se trata de una empresa pionera que te permite recargar tu coche eléctrico a domicilio y sin la necesidad de estar presente.
E-GAP acaba de llegar a la ciudad de Madrid, donde arranca un proyecto que prometen extender a otras ciudades españolas. Y es que esta empresa ofrece un interesante servicio para poder recargar tu vehículo eléctrico mientras trabajas, haces deporte o estás de compras.
E-GAP mejora la pésima infraestructura de recarga pública en España
No cabe la menor duda de que la infraestructura de recarga pública que existe actualmente en España es de las peores de Europa. Hay una notable falta de puntos de carga, además de que los existentes, en muchas ocasiones no están operativos o se encuentran ocupados. Son muchos los problemas a los que se tiene que enfrentar el conductor de un coche eléctrico y la llegada de empresas como esta permiten facilitar su uso.
Para ello a Madrid llegan un total de 20 furgonetas eléctricas que entrarán en funcionamiento antes de que finalice el año 2022. Para esa fecha E-GAP tiene previsto disponer de 100 vehículos en total. Mediante una aplicación en tu teléfono inteligente, quien desee solicitar sus servicios se pondrá en contacto con E-GAP y una vez registrado, sólo tendrá que fijar la ubicación del vehículo, dar detalles como la marca o el modelo y seleccionar la recarga que se desea. Una vez reservado el servicio, una furgoneta de E-GAP se desplaza hasta nuestro coche eléctrico y lo cargará incluso sin que nosotros tengamos que estar presentes.
Hasta 130 kW de potencia de recarga
En las ciudades lo habitual es encontrarnos con puntos de recarga rápida en corriente continua que suministran potencias de entre 20 y 50 kW. Y cuentas con los dedos de la mano los que que ofrecen potencias superiores a los 100 kW. Esas potencias las superan con creces las furgonetas con las que cuenta E-GAP, porque anuncian hasta 130 kW.
Si te estás preguntando por las tarifas, que sepas que estos varían en función del tipo de servicio y de sus características, pero oscilan entre los 18 y los 30 euros. Cierto que es más caro que cargar tu coche eléctrico en un punto físico, pero también ofrece un extra de libertad y permite aprovechar el tiempo. También debes tener en cuenta que ellos se desplazan al punto donde está tu coche.