Toyota es una marca muy comprometida con la protección del medio ambiente, y buena muestra de ello es su gama, donde hay seis modelos con mecánica híbrida; sí, esa con la que, por ejemplo, puedes circular por Madrid independientemente del 'escenario' de contaminación, o aparcar en zona verde o azul de la capital con un 50% de descuento -en otras ciudades también tienen sus ventajas-. Y estos ya son alicientes de peso a barajar por los más urbanitas.
Uno de esos seis híbridos es este Yaris 100H, que se actualizó hace unos meses con una nueva imagen y más tecnología, pues entre otros añade el Toyota Safety Sense, lo que redunda en más seguridad activa. Contrasta eso, sin embargo, con que este Feel! Bi-Tono no equipe sensor de encendido de luces -pero sí de lluvia-, o que cuente con cámara de marcha atrás pero no con sensores acústicos.
Son detalles de equipamiento a mejorar en este utilitario, que ahora, con descuentos, se queda en 17.450 euros, 2.500 por encima de lo que cuesta un Yaris 110 de cambio manual.
Sobre el Yaris, decir que es un utilitario espacioso -los 100H sólo se ofrecen con cinco puertas-, que está bien acabado y que tiene un comportamiento noble. Mecánicamente no hay sorpresas, pero se revisaron los soportes del motor, la admisión de aire, las barras de la transmisión o el escape para hacerlo más silencioso. Combina un 1.5 VVT-i de gasolina -con ciclo de funcionamiento Atkinson- con otro motor eléctrico y un conjunto de baterías bajo el asiento posterior.
La ciudad es su hábitat preferido
Es donde más se ayuda de su batería. Si piensas recorrer kilómetros y kilómetros en modo eléctrico EV -el botón queda escondido- vete olvidando, porque la capacidad de sus baterías es mínima y se recargan con la energía sobrante de su motor, en las frenadas y en las deceleraciones. Como mucho nos dará para circular un kilómetro, y siempre que no superemos los 50 km/h.
Su sistema híbrido está pensado para trabajar en modo ECO y dejar que su 'cerebro' gestione la energía de forma inteligente. Su motor eléctrico nos ayuda en las arrancadas y a baja velocidad, por lo que bajar de los 4,0 l/100 km en ciudad es 'pan comido', con un confort absoluto gracias a su cambio automático. Eso sí, hay que pillar el punto al freno, demasiado sensible.
Si nos animamos a salir fuera de la ciudad, el Yaris 100H cumple por prestaciones, pues le echa ganas a la hora de acelerar y recuperar. Aunque en ese escenario su cambio CVT se convierte en su enemigo, porque nos obliga a demandar siempre más energía a su motor térmico, y eso repercute negativamente en su consumo.
LA CLAVE
Si te consideras 'ecologista' y buscas un utilitario muy eficiente, este Yaris 100H es tu coche. Gasta lo mínimo en ciudad y poco en carretera; además, tiene cambio automático de serie y suma ventajas a la hora de aparcar y circular por ciudad. En viajes largos muestra sus carencias; aún así, es un utilitario interesante.