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Seat Ibiza SC 1.4 TDI. Vive en ayunas

El Ibiza sigue siendo un valor seguro. Seat lanzó la actual generación en 2010, pero en 2012 introdujo cambios y a mediados de 2015 acometió una renovación todavía más profunda que puso al día al modelo de Martorell en términos de mecánica, conectividad o seguridad. En los últimos meses habíamos probado algunas de las nuevas versiones, como las dotadas de los 1.0 EcoTSI tricilíndricos de gasolina con 95 y 110 CV, y esta vez apuntamos nuestra mirada al Ibiza menos 'sediento', equipado con un diésel también tricilíndrico: el 1.4 TDI CR. Está disponible con valores de 90 y 105 CV, pero también con los 75 CV que animan al Ibiza Ecomotive aquí analizado. Pueden parecer pocos, pero esos 75 'jacos' están disponibles a sólo 3.500 rpm y, muy importante, disfrutamos de un par máximo de 21,4 mkg entre 1.750 y 2.000 vueltas. Sus 'compañeros' de 90 y 105 CV son más briosos al realizar una conducción activa, pero tampoco ofrecen un par tan superior: 23,5 mkg entre 1.750 y 2.500 rpm. Y como los desarrollos de cambio -la caja es manual de cinco marchas y no hay opción a la DSG de siete que sí ofrece el 1.4 TDI 90- son acertados, el Ibiza 1.4 TDI 75 Ecomotive se adapta tan bien a los usos urbanos como a las salidas a carretera, sobre todo si nos movemos a ritmos legales por autovías o vías 'despejadas', es decir, sin necesidad de adelantamientos constantes y sin muchas curvas ni repechos.

Rodador de fondo 

Lejos queda, eso sí, cualquier atisbo de deportividad, pues anuncia 13 segundos para alcanzar 100 km/h desde parado; pero hay que reconocerle voluntad, ya que en esa maniobra le hemos medido 12,7 segundos y la capacidad de recuperación, aunque limitada, no es ridícula. Ahí están los 11,8 segundos cronometrados para pasar de 80 a 120 km/h usando cuarta.

No es un velocista, pero sí un rodador de fondo que administra al máximo el combustible, ayudado en la ciudad por una función Start/Stop que deja la media ahí en 4,8 l/100 km reales. Y fuera de la urbe podremos conseguir cifras de récord, pues nosotros, sin intentarlo -en el test habitual la conducción es normal, tendente a la 'alegría'-, le hemos medido 4,0 l/100 km en carreteras de doble sentido y 4,9 en autovía. De hecho, es uno de los cinco diésel menos 'sedientos' que ha pasado por nuestras manos en los últimos 15 años. Ahí queda eso.

Tener sólo tres cilindros le otorga ventajas de cara al par o al gasto, pero también genera más vibraciones, y aunque no podemos hablar de 'molestia', este 1.4 TDI 75 sí nos parece menos redondo de funcionamiento que los motores de cuatro cilindros como los que siguen usando muchos de sus rivales.

Del Ibiza hay que alabar su practicidad -más en el 5 puertas que en el SC de 3 probado- y la calidad general. O una buena relación entre precio -disfruta de 3.250 euros de descuento- y producto, aunque deberían ofrecerse más acabados con este motor al margen del Reference Plus, y en el equipo de serie echamos de menos los airbag de cortina, el quinto reposacabezas o la rueda de repuesto.

La clave

Cuesta en la práctica 12.640 euros -3.250 menos de lo anunciado- y gasta poquísimo. Pero poco de verdad. Si buscamos un utilitario 'herramienta' para la ciudad y frecuentes salidas por autovía es una opción ideal, sobre todo si hacemos más de 15.000 kilómetros al año. Si no, mejor un 1.2 TSI 90: 10.930 euros.