Tras la llegada de los sensacionales Ford Mustang Mach-e, Explorer, Capri o E-Tourneo Courier, la familia de vehículos eléctricos de la firma del óvalo azul se incrementó hace unas semanas con este Ford Puma Gen-E, el cual ya tuvimos la oportunidad de poder conducir el pasado mes de junio, dejándonos un extraordinario sabor de boca. Tanto que ya teníamos ganas de tenerlo con nosotros mucho más tiempo y poder buscarle las cosquillas a este interesante vehículo.
Como ya apuntábamos en su día, estéticamente tiene unos sutiles toques que ayuda a diferenciarlo del resto de sus hermanos, comenzando por una parrilla delantera carenada, la cual ayuda a este Ford Puma Gen-E a optimizar su aerodinámica en compañía de unas llantas específicas. De 17 pulgadas (215/55 R17) en la versión de acceso y de 18 pulgadas (215/50 R18) en esta unidad con el nivel de equipamiento Premium. Otro detalle que ayuda a diferenciarlo del resto de versiones es la ausencia de tubo de escape o si está pintado en Amarillo Electric o en este Azul Digital, colores exclusivos para esta versión eléctrica. Este último opcional por 750 euros.
El Ford Puma Gen-E tiene un maletero que es una caverna

Todos esos sutiles cambios en el exterior no afectan a las dimensiones exteriores de este Ford Puma Gen-E, que conserva unos más que ajustados 4,21 metros de largo. Sin embargo, la llegada de esa mecánica eléctrica si que conlleva mejoras de espacio en el interior, que comienzan con su maletero, que pasa de MegaBox a GigaBox gracias a pasar de 456 a 523 litros de capacidad. Y es que del doble fondo, fabricado en materiales compuestos para aligerar el conjunto y con un desagüe, se elimina el espacio reservado al silenciador del escape en las versiones con mecánica de combustión. Ese maletero también aumenta a 1.283 litros si se abaten los respaldos traseros y además añade un pequeño ‘frunk’ con 43 litros, muy práctico para guardar los cables de carga.
Cierto es que el Ford Puma no es el SUV urbano más espacioso del mercado, pero presenta unas plazas traseras bastante utilizables y con un piso totalmente plano, mientras que delante no hay problema alguno en cuanto a espacio. Ahora bien, con su última actualización llegó un nuevo diseño para el salpicadero y para los paneles de las puertas, donde parecen haber llegado unos plásticos duros de peor calidad que los utilizados hasta entonces. También el salpicadero resulta bastante sencillo con la ausencia de mandos o botones, porque ahora casi todo se opera desde la pantalla central táctil con 12 pulgadas. Y cierto es que hay que destacar su nuevo cuadro digital de 12,8 pulgadas.
Una mecánica eléctrica que cumple de sobra

El puesto de conducción de este Ford Puma Gen-E es como el de cualquiera de sus hermanos. Muy próximo al que tiene un turismo, pero un punto más elevado para tener una mejor visibilidad. Otro de los cambios es una consola central distinta al resto y con más espacios para dejar pequeños objetos. Todo ello gracias a que hay un freno de estacionamiento eléctrico y a que el selector del cambio se ha trasladado a la columna de la dirección. Justo por detrás de un volante achatado por arriba… Y también por abajo.
Poco más hay que añadir sobre la mecánica eléctrica que utilizan estos Ford Puma Gen-E, porque ya habíamos dicho en otras ocasiones que está formada por una máquina eléctrica con 123 kW de potencia (168 CV) y con 290 Nm de par motor. Ubicada en el eje delantero, se alimenta de la energía que acumula en una batería con 43 kWh de capacidad útil. Cifra que puede parecer no muy generosa, pero que cunde mucho más de lo que te pudieras imaginar en un vehículo del enfoque de este Ford Puma Gen-E.
376 kilómetros de autonomía homologa el Ford Puma Gen-E

No apostar por una batería más generosa hace que este Ford Puma Gen-E apenas pese unos 200 kilos más que uno equipado con el motor 1.0 EcoBoost MHEV. De igual manera que ayuda a marcar diferencias con sus hermanos mayores, los Explorer y Capri, cuya batería más pequeña tiene 52 kWh de capacidad. Sin olvidarnos de que es un punto clave a la hora de ajustar el precio final. Todo ello sin renunciar a una autonomía media homologada de 376 kilómetros. Cifra que baja hasta los 364 kilómetros en este Premium por la diferencia de equipamiento y de neumáticos.
No todos los días vas a recorrer más de 300 kilómetros sin parar con un vehículo del enfoque de este Ford Puma con independencia de la mecánica que esconda bajo su carrocería. Por lo que esa autonomía será más que suficiente para el 99% de tus días. Y si necesitas cargar rápido en caso de viaje, que sepas que admite recargas a una potencia máxima de 100 kW, pasando del 10 al 80% en cuestión de 23 minutos.
Un gasto medio de 14,8 kWh/100 km es más que ajustado

Oficialmente esta versión Premium del Ford Puma Gen-E homologa un gasto de 13,7 kWh/100 km, una cifra extraordinariamente baja para un vehículo de este tipo. Y sobre todo para conseguirla un vehículo que no ha nacido 100% eléctrico, sino que ha sido una adaptación del Puma ya existente. Lo que es digno de alabanza. Y es un gasto que se consigue en ciudad y en las carreteras de sus alrededores. Sin embargo a ritmos de autovía tendrás que preparar unos 18 kWh/100 km. De ahí que en este escenario la batería no cunda tanto y nos de para unos 235 kilómetros sin necesidad de parar a cargar. Pero si quieres más tienes un Explorer RWD 77 kWh.
Teniendo en cuenta todo esto, en nuestro recorrido hemos medido a este Ford Puma Gen-E un gasto medio de 14,8 kWh/100 km (que sepas que su ordenador de consumos no marca decimales). Que puedes considerar como muy ajustado y que ayuda a estirar esos 43 kWh que caben en su batería hasta los 290 kilómetros reales. Que no están nada mal, pero que puedes incluso exprimirlos al máximo si utilizas el programa de conducción ECO, que seleccionas junto a los Normal, Deportivo y Resbaladizo desde un botón colocado en la consola central.
Una sensacional dinámica para la versión eléctrica del Ford Puma

También se podría rascar algún kilómetro más de autonomía si la firma del óvalo azul se hubiera animado a equiparlo con levas en el volante para variar su capacidad de retención. Cosa que cierto es, puedes hacer con el botón ‘L’ del selector del cambio, que hace que retenga más (mucho más) pero que está en una posición que no invita a utilizar. O también acudiendo a la función E-One Pedal a la que hay que acostumbrarse.
Al resto es como si fuera tu coche de todos los días, porque no te llamará la atención el tacto del pedal del freno, el de la dirección… Todo va como en cualquier otro Ford Puma, haciendo que la aclimatación a esta versión eléctrica no te lleve más de cinco minutos. Cosa que se agradece, como la extraordinaria dinámica de la que hace gala gracias a la baja ubicación de esas baterías, que hacen que su centro de gravedad baje lo máximo posible, mejorando el aplomo y el comportamiento de este interesante SUV urbano con tintes deportivos.
Brillantes prestaciones y un completo equipamiento de serie

Pero todo ello sin tener que recurrir a unas suspensiones firmes, lo que agradeces en vías urbanas y también en carreteras en las que el firme no está en perfecto estado de revista. Sin duda un equilibrio extraordinario entre confort y dinámica que este Ford Puma Gen-E adereza con unas más que interesantes prestaciones, como demuestra con los 8,0 segundos que demanda para acelerar de 0 a 100 km/h (8,7 segundos requiere un Puma 1.0 EcoBoost 155 CV MHEV Powershift) o los 160 km/h de velocidad máxima que alcanza.
Vale que no es la versión más barata de la gama, pero ahora tienes un Ford Puma Gen-E desde 30.150 euros, cuantía que escala hasta los 32.450 euros en el caso de subir de nivel y apostar por este acabado Premium, que suma además de las mencionadas llantas, elementos como el acceso y el arranque ‘manos libres’, el portón trasero eléctrico, luces de carretera automáticas, retrovisores con plegado eléctrico e intermitentes, equipo de sonido Bang & Olufsen con 10 altavoces… Lo que compensa ese desembolso adicional al que vas a tener que sumar unos cuantos euros para hacerlo perfecto. Porque el Paquete Tech (900 euros) añade un sinfín de ayudas a la conducción que agradecerás en el día a día, mientras que el Paquete Invierno (600 euros) suma asientos delanteros y volante con calefacción, lo que en días fríos ayuda a mejorar el confort y a aliviar el gasto al ‘tirar’ menos de climatización.
Si sumas ayudas te sale más barato que el Ford Puma EcoBoost más ‘asequible’

Con todo ello tendrías un sensacional Ford Puma Gen-E al que incluso puedes descontar las ayudas del Plan Moves III de hasta 7.000 euros, las del IRPF… Con lo que se quedaría a un precio equiparable al del Ford Puma de combustión más asequible. Y si todos los días no vas a recorrer más de 300 kilómetros, en este los harás mucho mejor y con un toque ecofriendly. Que siempre mola en los tiempos que corren.
Fotos: Motor16







