En la era digital, las aplicaciones de navegación como Waze y Google Maps se han convertido en herramientas indispensables para millones de conductores. Sin embargo, su popularidad también ha atraído la atención de ciberdelincuentes que las utilizan como medio para perpetrar estafas. Una de las más recientes y preocupantes es el conocido «timo de la grúa pirata», una modalidad de fraude que puede costar a las víctimas hasta 3.500 euros.
Este engaño se aprovecha de la confianza que los usuarios depositan en estas aplicaciones y de la vulnerabilidad de los conductores que sufren una avería en carretera. A continuación, desglosamos cómo operan estos estafadores y qué medidas puedes tomar para protegerte.
1Cómo funciona el timo de la grúa pirata

El modus operandi de los estafadores comienza cuando detectan, a través de las alertas de Waze o Google Maps, que un conductor ha reportado una avería o incidente en la carretera. Aprovechando esta información, se presentan en el lugar antes que la asistencia oficial, haciéndose pasar por el servicio de grúa solicitado.
Una vez en el sitio, los delincuentes ofrecen su «ayuda» y convencen al conductor de que remolcarán su vehículo al taller. Sin embargo, en lugar de brindar asistencia legítima, exigen pagos en efectivo por adelantado y, en algunos casos, desaparecen con el coche, dejando al propietario sin vehículo y sin posibilidad de recuperar el dinero entregado.