El pasado enero, una Volkswagen T2 de colores azul y blanco se hizo viral en medio mundo después de que se publicara un artículo ilustrado con una foto de la agencia Associated Press (ver abajo) que mostraba cómo esta furgoneta era lo único que se había salvado de la devastación del incendio de Palisades, en Malibú, al sur de California. «Hay magia en ella», dijo su propietaria después de descubrir que el vehículo permanecía prácticamente intacto.
Esa misma Volkswagen T2, a la que bautizaron en redes como «la furgoneta mágica», ha sido el vehículo elegido por la marca para ser restaurada y de paso conmemorar así el Día Internacional del Volkswagen Bus. La fecha rinde homenaje a las icónicas furgonetas de la marca que, desde la clásica T1 hasta la innovadora ID. Buzz, han dejado una huella imborrable en la cultura del automóvil y en el corazón de generaciones.

La furgoneta protagonista de esta historia, a la que su conductora llamaba cariñosamente “Azul”, se convirtió en un símbolo de resiliencia, una especie de faro de esperanza en medio de la destrucción provocada por el incendio. Eso fue lo que inspiró a Volkswagen América para ponerse en contacto con su propietaria y ofrecerle su ayuda con una propuesta clara: evaluar el estado del vehículo y, si era posible, restaurarlo a su estado original.
“Recibir esa llamada fue un gran alivio”, confesó Megan Krystle Weinraub, la propietaria. “Sabía que «Azul» se estaba convirtiendo en un símbolo de esperanza y que la gente quería ver más de ella, pero la furgoneta necesitaba mucho trabajo y no estaba segura de cómo abordarlo”.
“Al igual que el resto del mundo, no podíamos creer lo que veíamos, Pero independientemente de lo bien que se veía en las fotos, sabíamos que necesitaba una revisión a fondo”, explicó Mark Gillies, Director de Relaciones Públicas y Reputación de Volkswagen Group of America.

El trabajo de restauración de la Volkswagen T2 se terminará a final de año
Tras obtener los permisos necesarios para acceder al vecindario de Malibú, “Azul” fue transportada al Campus de Ingeniería de la marca alemana en Oxnard, en California, una instalación que alberga la colección de vehículos históricos de Volkswagen América. Tras una inspección exhaustiva, el equipo de la marca determinó que, aunque su aspecto exterior era impresionante, el vehículo requería importantes reparaciones mecánicas y trabajos de carrocería para volver a ser completamente funcional.
El trabajo de restauración ya ha comenzado y se espera que se complete a finales de este año. El equipo de expertos de Volkswagen está trabajando para devolverle a “Azul” su antiguo esplendor, utilizando piezas originales y técnicas de restauración de vanguardia.

El compromiso de la marca con California
Este proyecto no solo busca restaurar un vehículo, sino también preservar un pedazo de historia y mantener vivo el espíritu de las furgonetas Volkswagen. La restauración de “Azul” es un testimonio del compromiso de la marca con su legado y con la comunidad de California.
Volkswagen reconoce la importancia de apoyar a la comunidad de California mientras continúa reconstruyéndose tras la devastación causada por los recientes incendios. En febrero, la marca donó fondos a la California Fire Foundation, una organización sin ánimo de lucro que apoya a los bomberos y sus familias en todo el estado.
“California siempre será sinónimo del Volkswagen Bus”, afirmó Rachael Zaluzec, Vicepresidenta Senior de Marketing y Experiencia del Cliente del Grupo en America. “Volver a poner a «Azul» en la carretera permitirá que su magia y su mensaje de esperanza continúen y escribir otro maravilloso capítulo en nuestra conexión cultural con el estado dorado”.