Según ha comentado Herbert Diess, consejero delegado del Grupo Volkswagen, a un grupo de trabajadores de la marca alemana durante un reciente encuentro, el fabricante de Volksburg prevé reducir los tiempos de producción de sus vehículos eléctricos en al menos un tercio de los actuales plazos, como una de las principales acciones para competir de manera más directa con Tesla los próximos años.
De las actuales 30 a 10 horas en 2022
Según informaciones recogidas por la agencia norteamericana Bloomberg, Diess habría manifestado durante dicha reunión que Volkswagen aspira a tardar un máximo de diez horas en la producción de un nuevo vehículo eléctrico. Actualmente, en su factoría de Zwickau, la producción de un vehículo eléctrico precisa de algo más de 30 horas para su producción, plazo que Volkswagen se ha propuesto reducir hasta alcanzar tan sólo las 20 horas en 2022.
Sin embargo, estos planes podrían verse retrasados debido a la actual escasez y crisis de suministro que está provocando graves problemas de escasez de materiales en general y, particularmente de microchips, lo que ha llevado a la cancelación de algunos turnos de trabajo y está provocando importantes rebajas en los volúmenes de producción de las factorías del grupo automovilístico alemán.
Valorar la competencia de Tesla hace fuerte al grupo
Aún así, Diess se mantiene firme en comparar la actual productividad de Volkswagen con la de algunos fabricantes rivales, en concreto con Tesla. «Muchas veces me preguntan sobre el por quésigo comparando nuestras marcas con Teslay se que esto resulta molesto para muchas personas. Sin embargo, mi labor y la de todo el equipo gestor incluye el valorar a nuestra competencia correctamente, preparar a nuestro Grupo para hacerle frente y aún más resistente de cara al futuro.
Esta decisión en materia de producción se une a otras recientes adoptadas por el grupo automovilístico alemán. Entre ellas destaca la de decir adiós por completo a partir del año 2023 a la producción de nuevos modelos con cambio manual. Una decisión que ya estaba tomada en otros mercados como el norteamericano, pero que parece que finalmente se va a trasladar a escala global a los mercados en los que la marca está presente.
Solo cambios automáticos a partir de 2023
Gracias a las mejoras técnicas introducidas durante la última década en las transmisiones automáticas y, sobre todo, al importante beneficio que reporta en materia de economías de escala producir de manera global este tipo de transmisiones, el grupo automovilístico alemán ha optado por decantarse por la producción de transmisiones automáticas (ya sean de convertidor de par, de variador contínuo o de doble embrague) en lugar de proseguir con la producción de cajas de cambio manuales.
De esta manera, a partir de 2023, los nuevos modelos Volkswagen que lleguen al mercado no dispondrán de cambios de marcha manuales en sus respectivas gamas, con la intención de que, para antes incluso de 2035, este tipo de transmisiones hayan sido eliminadas por completo de la gama del fabricante de Volksburg y toda ella sea ya automática. Una decisión en la cual Volkswagen se adelanta a otros fabricantes alemanes, como BMW, Mercedes e incluso su propia marca hermana Audi.
Más eléctricos y sólo automaticos para 2030
Las nuevas generaciones de modelos como el Tiguan o el Passat serán las primeras en avanzar con esta política de retirada de las transmisiones manuales en la marca alemana.
Otra de las decisiones con respecto a su gama es la progresiva eliminación en la misma de las unidades dotadas con motores de combustión. Volkswagen prevé que para 2030, el 70 por ciento de sus ventas sean modelos impulsados por motores eléctricos.