Volkswagen está concienciada en reducir al máximo los accidentes de tráfico y, sobre todo, en evitar pérdidas humanas por esta causa. No sólo invierte tiempo y dinero en desarrollar innovadores sistemas de seguridad activa, sino que busca formar a sus clientes, o no clientes, gracias a sus programas de conducción.
Race Tour, 4Motion Experience, Escuela R… Son algunos de los cursos de formación que ofrecen, bien para dar a conocer sus nuevos productos o bien para que su impresionante equipo de instructores -con Luis Moya como embajador- enseñen a los asistentes cómo sacar el máximo partido a su vehículo, además de ganar confianza y, sobre todo, seguridad en la conducción.
Escuela R Junior, complemento a la auto escuela
La temporada comienza con la Escuela R, y el trazado de Ascari es su punto de partida. Allí hemos podido disfrutar de una jornada de aprendizaje como la que protagonizan quienes acuden a estos cursos, a los que ahora se suma otro interesante programa: la Escuela R Junior.
Especialmente indicada para jóvenes conductores con menos de dos años de carné, se enfoca como un complemento a la autoescuela. A sus participantes se les instruye con detalles útiles en la conducción diaria, como son la posición al volante, aprender a mirar lejos, la colocación de las manos… Pero también se les conciencia sobre los efectos al volante del alcohol, las drogas o el teléfono móvil.
Un curso de conducción en el que no rodásemos en pista no se podría considerar como tal. Por ello, y para consolidar nuestros conocimientos, se realizan diferentes pruebas en las que experimentar nuestros avances al volante de versiones deportivas como son los Polo GTI y Golf GTI.
R Intensive y Advance. Para usuarios avanzados
Por encima de este nuevo programa de iniciación a la Escuela R de Volkswagen se siguen ofreciendo los cursos R Intensive y R Advance, enfocados a quienes quieren ir un paso más allá y perfeccionar su técnica de conducción, sobre todo enfocada a un uso en carretera abierta, pero también en circuito.
Ambos cursos constan de una parte teórica en la que los instructores nos van a explicar sobre el papel detalles como el comportamiento del vehículo, lo importante que es la transferencia de masas, la posición al volante o cómo negociar todo tipo de curvas. Y estos conocimientos son los que posteriormente se trasladan al 'campo de batalla', la pista, pilotando vehículos deportivos con hasta 300 CV de potencia y efectivos sistemas de tracción 4Motion que son capaces de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y de alcanzar velocidades de 250 km/h.
Acompañados en todo momento de un experimentado instructor, quien nos explica cómo mejorar y progresar en cada una de las diferentes pruebas; mientras que el plato fuerte lo van a poner las tandas en el circuito, donde demostraremos a nuestro 'copiloto' que hemos aprendido, y que somos mejores conductores y más rápidos. Pero, sobre todo, que somos más seguros que antes del curso, que es de lo que se trata.