El verano es sinónimo de vacaciones, escapadas y largos desplazamientos por carretera. Con más de 100 millones de viajes previstos durante julio y agosto, según la Dirección General de Tráfico (DGT), esta temporada se consolida como uno de los momentos de mayor actividad en las vías españolas. En este contexto, los coches eléctricos han dejado de ser una novedad para convertirse en una alternativa real y cada vez más popular entre quienes desean desplazarse de forma sostenible y eficiente.
Gracias al desarrollo continuo de la infraestructura de carga pública, viajar en un vehículo eléctrico por España es más sencillo de lo que muchos imaginan. La red de cargadores —en especial los ultrarrápidos— ha crecido notablemente, posicionando a España entre los países europeos con mejor cobertura en proporción al número de vehículos eléctricos. Pero para que la experiencia sea verdaderamente placentera, conviene tener en cuenta una serie de recomendaciones clave. Aquí te compartimos cinco consejos prácticos para disfrutar al máximo tu viaje de verano en coche eléctrico y evitar cualquier contratiempo.
1Planifica tu viaje antes de salir con tu eléctrico

Uno de los aspectos más importantes al viajar en coche eléctrico es la planificación. Aunque la autonomía de estos vehículos ha mejorado significativamente, es fundamental trazar una ruta que tenga en cuenta la ubicación de los puntos de recarga. Aplicaciones como Electromaps, Octopus Electroverse o Chargemap ofrecen información en tiempo real sobre la disponibilidad y tipo de cargadores, lo que permite organizar las paradas estratégicamente según las necesidades de tu coche. Además, muchas de estas plataformas están integradas con redes como Powerdot, lo que facilita su uso sin necesidad de instalar múltiples aplicaciones.
La clave está en prever no solo los lugares de carga, sino también el tiempo que necesitarás en cada parada. A diferencia de los coches de combustión, aquí no se trata solo de repostar, sino de aprovechar ese tiempo para descansar o realizar alguna actividad. Una planificación detallada evita imprevistos, reduce la ansiedad y convierte el trayecto en parte del disfrute del viaje. Al final, viajar sin prisas y con tranquilidad es también una forma de hacer vacaciones.