La movilidad sostenible se ha convertido en una de las grandes conversaciones de nuestro tiempo. Cada vez más ciudadanos son conscientes de que reducir las emisiones de CO2 y apostar por medios de transporte respetuosos con el medioambiente no es una moda pasajera, sino una necesidad. Sin embargo, entre la teoría y la práctica aún existe un hueco que en España cuesta salvar.
Un reciente estudio del Observatorio Midas de la Movilidad arroja luz sobre cómo vemos los españoles los llamados vehículos sostenibles, y lo cierto es que las conclusiones sorprenden. Aunque la preocupación por el medioambiente crece, el camino hacia un parque automovilístico verdaderamente sostenible parece estar lleno de obstáculos: económicos, prácticos y también culturales.
6El mantenimiento, la pieza clave de la movilidad sostenible

Sea cual sea la tecnología que termine imponiéndose, el mantenimiento será crucial. Mantener un vehículo en perfecto estado no solo alarga su vida útil, también reduce su impacto ambiental y mejora la seguridad en carretera. Un coche sostenible no es solo aquel que emite menos, sino también el que se mantiene eficiente durante años.
En este punto, compañías como Midas recuerdan la importancia de contar con talleres formados en todas las tecnologías: eléctricos, híbridos y de combustión modernos. Solo así se garantiza que el usuario dé el paso hacia la movilidad sostenible sin miedo a encontrarse con costes imprevistos o falta de servicio técnico.