La movilidad sostenible se ha convertido en una de las grandes conversaciones de nuestro tiempo. Cada vez más ciudadanos son conscientes de que reducir las emisiones de CO2 y apostar por medios de transporte respetuosos con el medioambiente no es una moda pasajera, sino una necesidad. Sin embargo, entre la teoría y la práctica aún existe un hueco que en España cuesta salvar.
Un reciente estudio del Observatorio Midas de la Movilidad arroja luz sobre cómo vemos los españoles los llamados vehículos sostenibles, y lo cierto es que las conclusiones sorprenden. Aunque la preocupación por el medioambiente crece, el camino hacia un parque automovilístico verdaderamente sostenible parece estar lleno de obstáculos: económicos, prácticos y también culturales.
5¿Qué tecnología será la ganadora?

Sobre cuál será la motorización dominante en los próximos 5-10 años, no hay unanimidad entre los españoles. Un 38,4% apuesta por los híbridos como la opción más realista y cercana; y un 22,2% confía en que los eléctricos puros tomen el relevo. Mientras tanto, un 21% cree que los motores de combustión seguirán teniendo protagonismo, especialmente con modelos más eficientes y menos contaminantes.
Lo que está claro es que la transición no será inmediata ni lineal. Cada tecnología tiene su espacio, y probablemente convivirán durante más tiempo del que a algunos les gustaría. Para que la movilidad sostenible se convierta en una realidad, las piezas del puzle deben encajar: precio, infraestructuras, apoyo institucional y, por supuesto, confianza del consumidor.