Miles de conductores se lanzan a la carretera este verano para disfrutar de sus vacaciones, y tarde o temprano tendrán que pasar por la gasolinera para repostar y seguir su viaje. Las autovías señalan dónde se encuentran los desvíos, pero siempre asalta la duda sobre si estará cerca o habrá que dar un rodeo para llegar. Esa incertidumbre es un pequeño momento de estrés en medio del viaje que puede hacerte dudar sobre qué hacer.
Sin embargo, hay un truco escondido en las señales. Un detalle muy sencillo que, una vez que lo conozcas, te permitirá saber si la gasolinera está a pie de carretera o si te espera un pequeño desvío.
El color de las señales
Cuando se trata de encontrar una gasolinera, el color de la señal es la primera pista para descifrar si tendrás que desviarte o no. Este sistema de codificación visual está diseñado para que puedas tomar decisiones rápidas incluso a alta velocidad, reduciendo la necesidad de procesar mucha información y, por lo tanto, mejorando tu seguridad al volante.
Si vas conduciendo por una autovía o autopista y ves una señal de gasolinera de color azul, es lo mejor que puedes encontrar. Este color te indica que la estación de servicio se encuentra justo al lado de la vía principal, sin que tengas que realizar ningún desvío significativo. La salida te llevará al surtidor, haciendo de tu parada un proceso rápido y cómodo.
Cuando la señal de gasolinera que ves es de color verde, la situación es un poco diferente. Este color te avisa de que la estación de servicio está cerca de la autovía, pero no pegada a ella. Para llegar, tendrás que tomar un pequeño desvío, generalmente hacia una carretera o vía rápida de menor categoría. Aunque implica una salida de la vía principal, no suele ser un rodeo complicado ni muy largo.
Una señal blanca te está indicando que la gasolinera se encuentra fuera de la autovía principal, normalmente en una carretera provincial, comarcal o local. Esto significa que tendrás que desviarte varios kilómetros de la ruta para repostar.
Distancias que apuntan dónde está la gasolinera
Además del color, los números que aparecen en las señales de gasolinera te ofrecen otra pista vital. No solo te informan sobre la distancia a la salida, sino que el patrón revela si la gasolinera está junto a la autovía o si te exigirá un desvío. La combinación de los colores y estos patrones numéricos en las señales constituye un sistema de señalización redundante y complementario, diseñado para asegurar que el conductor comprenda la información crítica.
Si ves distancias que terminan en «00», como «1000 metros» y luego «500 metros» en señales sucesivas, esto es una clara indicación de que la gasolinera está justo al lado de la autovía. No hay un desvío significativo; la salida te lleva a ella.
Por el contrario, si las distancias que aparecen en la señal terminan en «50», como «750 metros» y luego «250 metros», esto te está avisando de que la gasolinera está más lejos y que tendrás que salir de la autovía para llegar a ella. Esto implica un desvío por una carretera secundaria o convencional.
Convierte la carretera en tu aliada
Comprender el significado de estas señales transforma tu experiencia de conducción de una pasiva a una proactiva. No se trata únicamente de saber dónde repostar, sino de optimizar tu viaje en términos de eficiencia, seguridad y bienestar emocional.
Esa sensación de no saber dónde está la próxima gasolinera o de haberse desviado para nada puede ser muy agobiante. Entender estas señales te proporciona una gran tranquilidad y te da un mayor control sobre tu viaje. Reduces la ansiedad y el estrés, sabiendo qué esperar.
Además, saber de antemano si tienes que desviarte te permite prepararte con tiempo. Puedes cambiar de carril con calma, señalizar tu salida con antelación y tomar la incorporación sin prisas ni maniobras bruscas.
La próxima vez que te encuentres en la autovía buscando una gasolinera, solo tienes que fijarte en dos detalles, el color de la señal y los números de la distancia..
Este conocimiento te permitirá planificar mejor tus paradas, hacer tus viajes más seguros, más eficientes y, sobre todo, mucho menos estresantes. ¡Ahora, a disfrutar del camino con la tranquilidad de saber siempre dónde repostar!
