En España, la problemática de los vehículos registrados a nombre de personas fallecidas persiste, planteando desafíos tanto para la Dirección General de Tráfico (DGT) como para los herederos y la comunidad en general.
Este artículo explora las complejidades jurídicas y administrativas que rodean a esta situación, destacando las posibles multas y consecuencias legales que pueden enfrentar quienes no resuelven adecuadamente esta cuestión.
2Consecuencias en caso de accidentes
En situaciones de accidentes de tráfico, la titularidad incierta de un vehículo puede complicar la asignación de responsabilidades y generar disputas legales. Además, la falta de notificación del fallecimiento del titular a la DGT y la aseguradora puede resultar en demoras y complicaciones en el proceso de reclamación de seguros, afectando a terceros conductores involucrados en el accidente.