El Servicio Catalán de Tráfico (SCT) está ultimando una propuesta que podría cambiar radicalmente la movilidad de los ciclistas en Cataluña. Tras un notable aumento de corredores en vías interurbanas y costeras, el SCT ha advertido que estudia prohibir la circulación de bicicletas en determinados tramos y horarios.
La medida, todavía en estudio, surge como respuesta a crecientes conflictos entre vehículos motorizados y ciclistas. Este artículo analiza en detalle las razones, el alcance, las consecuencias y las alternativas planteadas para suavizar el impacto.
5Críticas y dificultades

La propuesta no está exenta de polémica. Algunos sectores advierten del riesgo de limitar los derechos de los ciclistas y de generar discriminación respecto a otros usuarios de la vía. Además, muchas de las rutas afectadas dan acceso a negocios dependientes del turismo motorizado, lo que complica cualquier veto total.
En términos prácticos, llevar a cabo un control horario eficaz implica recursos, vigilancia constante y señalización específica. Esto eleva los costes administrativos que, por ahora, el SCT deja en suspenso: “la tenemos en el cajón”, reconoce su coordinador Óscar Llatge.