El Servicio Catalán de Tráfico (SCT) está ultimando una propuesta que podría cambiar radicalmente la movilidad de los ciclistas en Cataluña. Tras un notable aumento de corredores en vías interurbanas y costeras, el SCT ha advertido que estudia prohibir la circulación de bicicletas en determinados tramos y horarios.
La medida, todavía en estudio, surge como respuesta a crecientes conflictos entre vehículos motorizados y ciclistas. Este artículo analiza en detalle las razones, el alcance, las consecuencias y las alternativas planteadas para suavizar el impacto.
1Por qué surge la propuesta

El origen del debate está en un incremento sostenido del uso de la bicicleta en carreteras catalanas, especialmente desde la pandemia. Esa mayor presencia ha provocado un aumento de “malentendidos” entre ciclistas y conductores, lo que mejora las cifras de visibilidad pero complica la convivencia.
Las zonas más conflictivas, como la costa del Garraf o vías intermunicipales, concentran buena parte de esos incidentes. En ellas, la movilidad motorizada y las instalaciones asociadas (restaurantes, negocios) complican aún más la circulación conjunta.