Hoy en día la mayoría de los SUV del mercado son más deportivos que útiles fuera del asfalto, ya que no suelen ser más que coches corrientes que han sido levantados ligeramente para gozar de una mayor distancia al suelo y así sentir mayor seguridad.
Sin embargo, esto no era lo común hace dos décadas, cuando podías tranquilamente adquirir una versión de calle de algunos coches militares, como el Hummer h2 en los Estados Unidos o el Toyota Mega Cruiser en el caso de Japón. No te preocupes si nunca has oído hablar de este último, es lo normal, ya que tan solo se fabricaron 100 de los modelos destinados a circular por las calles y todos ellos fueron vendidos en su país natal.
De 1995 a 2001
En un principio, el Mega Cruiser se diseñó como un vehículo militar para las tropas japonesas pero, pronto, alguien se dio cuenta del tremendo potencial que tenía como modelo de calle. Así es como la firma nipona fabricó 100 ejemplares del mismo con algunas diferencias, todos ellos con el volante a la derecha, ya que se iban a vender solo en Japón. Esta versión se presentó en 1995 y las reservas para hacerse con uno se abrieron en enero de 1996. Esta auténtica bestia medía 5 metros de largo, 2,2 de ancho y 2,1 en altura, y era capaz de acomodar a seis adultos perfectamente, además de disponer de una capacidad de carga de 750 kg. Además, su peso de 2.850 kilos lo hacía ser todo un mastodonte circulando.
La versión de calle tenía diferencias respecto a la militar, ya que esta última tenía disponibles numerosas carrocerías; desde una sin techo hasta modelos tipo furgoneta. Sin embargo, el modelo de calle solo se ofrecía con un techo rígido y a un precio de 93.600 dólares.
La potencia del coche venía dada por un motor de cuatro cilindros en línea diésel que ofrecía 150 CV de potencia y tracción total permanente. La caja de cambios era automática y de cuatro relaciones.