¿Tienes coche propio? ¿No? ¿Te resulta más cómodo alquilar uno cuando lo necesitas? Si tienes entre 25 y 55 años, no estás solo: formas parte de la generación que está cambiando la forma de moverse por la ciudad. Atrás quedó la idea de que tener un vehículo en propiedad era imprescindible. Hoy, lo importante es poder moverse con libertad, sin ataduras.
El coche sigue siendo necesario, pero ya no se conduce ni se posee como antes. Según un estudio de la Asociación del Vehículo Compartido (AVCE), más del 77% de los usuarios de carsharing son de esta franja de edad. ¿Por qué? Las respuestas revelan una nueva mentalidad en torno a la movilidad urbana.
4Una solución para hogares con varios conductores

El perfil de las familias españolas también ha cambiado. Ya no es raro ver hogares con pocos o incluso sin coches. El estudio señala que el 41% dispone de un único vehículo, el 29% tiene dos, y un 18% no tiene ninguno. Para estos últimos, el coche compartido es una herramienta fundamental para no depender del transporte público o de terceros.
Este tipo de movilidad permite que varios miembros de una familia puedan acceder a un coche en momentos puntuales, sin que ello implique tener que comprar un segundo vehículo. En núcleos urbanos, el uso diario del coche es limitado, hay otras formas de transporte más eficientes. Y para esas ocasiones en que sí es necesario un coche, el carsharing cumple su función a la perfección.