Tesla ha anunciado una retirada masiva de casi 2 millones de vehículos debido a un problema relacionado con el cierre del capó, lo que ha provocado que la compañía supere a Ford en el número de vehículos retirados en lo que va del año. Este retiro es significativo no solo por la cantidad de coches afectados, sino también por la naturaleza del problema: un defecto de software que podría llevar a situaciones peligrosas para los conductores.
La empresa de Elon Musk ha informado que esto afectó a 1.849.638 vehículos eléctricos fabricados entre 2013 y 2024. Los modelos incluyen el Model S (2013-2024), el Model X (2016-2024), el Model 3 (2017-2024) y el Model Y (2020-2024). Este retiro masivo se suma a una serie de problemas que la compañía de automóviles eléctricos ha tenido que abordar en el pasado, pero esta vez, la magnitud del retiro supera significativamente a cualquier otra campaña anterior de la empresa.
¿Cómo es en detallado el problema en el capó que sufren estos Tesla?

El problema específico radica en el mecanismo de cierre del capó, fabricado en China, que puede no detectar si el capó está correctamente cerrado. Esto significa que no se activará la advertencia al conductor sobre el peligro potencial. Aunque los capós están diseñados con un seguro que evita que se abran completamente mientras el vehículo está en movimiento, existe el riesgo de que el capó pueda levantarse parcialmente, oscureciendo la visión del conductor y creando una situación peligrosa en la carretera.
Afortunadamente para los propietarios de Tesla, no será necesario que lleven sus coches a un concesionario para solucionar el problema. La compañía de Elon Musk ha implementado una corrección de software mediante una actualización por radio (OTA, por sus siglas en inglés) durante las últimas dos semanas de junio. Esta solución remota es un ejemplo de cómo la tecnología puede facilitar la resolución de problemas de manera eficiente, sin la necesidad de intervenciones físicas en el vehículo.
Comparativa con Ford

Con este retiro, Tesla ha alcanzado un total de 4,4 millones de vehículos retirados en lo que va del año 2024, superando a Ford, que ha retirado 3,66 millones de vehículos en el mismo período. Aunque Ford ha anunciado más campañas de retirada (31 frente a ocho de Tesla), el volumen de vehículos afectados por Tesla es considerablemente mayor. Esta situación pone de relieve los desafíos que enfrentan los fabricantes de automóviles en la gestión de la calidad y la seguridad de sus vehículos, especialmente en un mercado tan competitivo como el actual.
La retirada masiva por parte de la compañía de Elon Musk subraya la importancia de la vigilancia continua y la capacidad de respuesta rápida a los problemas de seguridad. Mientras que la actualización de software ha resuelto el problema sin la necesidad de visitas a los concesionarios, la situación plantea preguntas sobre la fiabilidad de los componentes fabricados por proveedores internacionales y la capacidad de los fabricantes de automóviles para detectar y abordar problemas potenciales antes de que afecten a tantos vehículos.