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Suzuki Vitara 2018. Ya lo hemos conducido

El Suzuki Vitara siempre ha sido uno de los SUV más equilibrados de su segmento. Y para mantener el tipo en uno de los frentes más activos y competidos del mercado, el modelo japonés se pone al día con una intensa actualización que salpica tanto al contenido como al continente, con ligeros cambios estéticos, un nuevo motor y un claro incremento de tecnología en aspectos como la seguridad.

Exteriormente el renovado Vitara es fácilmente reconocible por la nueva parrilla frontal cromada, el paragolpes también con acabados cromados, las nuevas llantas de 17 pulgadas o el nuevo diseño de los pilotos traseros, ahora con tecnología Led. Además se incorporan tres nuevas combinaciones de pintura bitono para la carrocería, para llegar a ofrecer un total de ocho, más otros siete monotono.

También el interior se renueva con nuevas tapicerías mixtas, remates en gris perlado, salpicadero en 'soft', una nueva pantalla de LDC de 4,2 pulgadas en color en el cuadro de mandos y con más información, o un nuevo reloj analógico ubicado en posición central por encima de la pantalla táctil de 7 pulgadas que preside el salpicadero.

Seguridad muy reforzada

La seguridad es uno de los puntos que ha salido claramente beneficiado. Hasta el momento contaba con elementos como un control predictivo de frenada y un control de velocidad adaptativo. Ahora añade asistentes como el freno atenuador de colisiones DSBS, una alerta de cambio de carril, otra de fatiga del conductor,un reconocimiento de señales de tráfico, un control del ángulo muerto o un aviso de tráfico cruzado en la zaga, los tres últimos nuevos en Suzuki. Con todo este nuevo arsenal el Vitara pasa a convertirse en uno de los modelos más avanzados del segmento.

Bajo el capó ya no hay opción al diésel. La oferta contempla el conocido motor 1.4 Boosterjet de 140 CV y el nuevo 1.0 Boosterjer tricilíndrico de 111 CV, novedad que protagonizará la mayor parte de las ventas del modelo. Ambos propulsores se pueden combinar con cajas manuales, de cinco relaciones en el más modesto y de seis en el más potente, además de una transmisión automática con convertidor de par de seis velocidades disponible en ambos casos. No hay cambios en cuanto al sistema de tracción total 4WD ALLGRIP. Por lo tanto encontramos los cuatro modos de conducción seleccionables, Auto, Snow, Sport y Lock, además de un control de descensos.

Tuvimos ocasión de probar la nueva motorización tricilíndrica turboalimentada de 111 caballos en un día lluvioso, tanto en autopista, como en carretera y en aptitudes off road. El motor no puede ocultar su naturaleza impar debido a un sonido 'diferente', que no molesto, y alguna vibración extra en el volante, aunque no es de los más 'castigados' en este sentido. Recupera con voluntad desde bajo régimen, gracias a los 17,3 mkg de par máximo que ofrece entre 2.000 y 3.000 rpm (curiosamente con la caja automática recorta a 16,3 mkg, pero amplía el abanico entre 1.800 y 4.000), y si le exigimos el corte se produce a 6.000 vueltas.

Buenas maneras dinámicas

No hay novedades en el chasis, con sistema McPherson delante y un eje de torsión detrás, donde muestra un gran equilibrio entre confort y dinámica, con balanceos controlados de la carrocería y un agradable tacto general de todo, aunque con algún matiz en el cambio, donde en ocasiones hay que 'marcar' más de la cuenta el movimiento de palanca. En tráfico abierto no pudimos alcanzar los 180 km/h de velocidad máxima que firma, ni acelerar de 0 a 100 km/h en 12,0 segundos que anuncia nuestra versión equipada con tracción total. Cuando el Vitara pase por nuestra redacción daremos como es costumbre las cifras registradas, incluido el de consumo, que durante el trayecto, y a título orientativo, fue de 7,0 litros (homologa 5,7).

También tuvimos ocasión de afrontar un recorrido off road, donde el barro y un par de vadeos fueron los grandes protagonistas. Con el modo Snow y el bloqueo del diferencial central activados completamos el circuito, aunque en ocasiones la falta de adherencia era evidente debido a unos neumáticos 215/55 R17 de enfoque claramente asfáltico. No es un todoterreno al uso, aunque sí se trata de uno de los SUV más camperos del segmento, sin duda.

Tres niveles de acabado

Por último señalar que el Vitara ya está a la venta con tres niveles de acabado, más la serie especial Toro. El de entrada es el GL, sólo está disponible con tracción delantera y el motor 1.0 y su papel es hacer más atractivo el precio de la gama, ya que está disponible desde 18.540 euros. El siguiente escalón es el GLE, donde se concentrará la mayor parte de las ventas, y cuyo equipamiento de serie contempla llantas de 17 pulgadas, climatizador, pantalla táctil de 7 pulgadas con conexión al smartphone, cámara trasera, limitador y control de velocidad de crucero (adapativo en los 4×4), DSBS y control de descensos también con tracción total o asientos calefactos, entre otros. El precio arranca en 20.440 con el motor 1.0 y en 21.640 con el propulsor 1.4.

El acabado GLX sólo está disponible con la mecánica más potente y añade elementos como luces Led para las cortas, navegador, sensores de luces y lluvia, techo solar panorámico o acceso y arranque sin llave, entre otros. La factura parte desde los 23.890 euros. A esos precios se les aplicará un descuento promocional de 1.300 euros, más otros 1.505 en caso de financiar con la marca. La tarifa de 'guerra' sería desde 15.735 euros.

PRECIOS

1.0T M5 GL 18.540 euros

1.0T M5 GLE 20.440 euros

1.0T AT6 GLE 21.940 euros

1.0T M5 GLE 4WD 22.540 euros

1.0T AT6 GLE 4WD 24.040 euros

1.4T M6 GLE 21.640 euros

1.4T M6 GLX 23.890 euros

1.4T M6 TORO 24.905 euros

1.4T M6 GLX 4WD 25.690 euros

1.4T AT6 GLX 4WD 27.790 euros